"Las canciones son mi carta de presentación. No puedo hacer otra cosa que componer y transmitirle a la gente lo que siento", señaló a EFE el artista en una entrevista con motivo de su primer concierto en Barcelona, una de las paradas de su tour español.
El intérprete de temas como "Somos tres", "Cálido y frío" o "Extranjero" explicó que se ha propuesto hacer sentir a la gente de España la misma emoción que ha generado del otro lado del Atlántico a lo largo de sus 25 años de carrera.
De Vita reconoció que la ausencia de apoyo discográfico ha hecho más difícil la labor, pero no renuncia a ello, y asegura que "es cuestión de trabajo".
"Simplemente la verdad" reúne once temas que, a diferencia de clásicos como "No basta", "Mi amigo Sebastián" o "Los hijos de la oscuridad", de los que se siente especialmente orgulloso, plantean una reflexión "emocional" sobre el contacto con las demás personas.
"Puede reflejar eso o también la verdad de la vida. Porque recibir un abrazo, pero recibirlo con sinceridad o con amor, se agradece", indicó el artista.
Se trata de una producción intensa y "sincera" en la que el italo-venezolano pone a prueba su habilidad para hablar sobre el amor sin repetirse, uno de los retos más difíciles a los que confiesa enfrentarse este trovador que lleva casi tres décadas componiendo canciones románticas.
"Espero que nos sigamos enamorando", bromeó antes de explicar que mantiene vivas la ilusión y las ganas de seguir cantando sobre el amor, tratando siempre de hacer cosas diferentes y divertirse mientras lo hace.
Aunque De Vita ha cedido algunas de sus piezas más conocidas para musicalizar campañas humanitarias, siente que es poco lo que hace por ayudar a gran escala.