En relación con el accidente ocurrido en Palomares hace cuatro décadas y las actuaciones encomendadas al Centro de Investigaciones Emergéticas, Medioambientales y Tecnológicas CIEMAT, tras la expropiación de los terrenos afectados, este organismo ha puesto en marcha, a través de su Departamento de Medio Ambiente y bajo la supervisión del Consejo de Seguridad Nuclear, el Plan de Investigación Medioambiental en materia de vigilancia radiológica en los terrenos afectados, tal y como acordó el Gobierno.
Entre los objetivos de este plan está el profundizar en el análisis de las áreas expropiadas (9Ha) (Puerto Blanco- El Jatico y La Punta), en las que se han detectado indicios de contaminación residual en el subsuelo. Para esta tarea se utilizarán las más modernas herramientas tecnológicas disponibles y se contará con la cooperación de expertos del Departamento de Energía de Estados Unidos.
Los trabajos más inmediatos se plasmarán en la realización, en los próximos meses, de un mapa radiométrico superficial y otro en profundidad. En una primera fase se efectuará la caracterización radiológica superficial utilizando una malla de 5x5 m2. En los puntos donde dicha caracterización muestre su valor máximo se recogerán muestras de suelo superficial (hasta una profundidad máxima de 15 cm)
para su posterior análisis en laboratorio. Esta primera parte del trabajo se extenderá de marzo a julio de 2007.
Con la información obtenida en esta fase se definirá una segunda etapa que se iniciará en octubre-noviembre de 2007 y que consistirá en la realización de sondeos y toma de muestras significativas en las diferentes profundidades alcanzadas para su análisis. El número de muestras a analizar dependerá de los sondeos ejecutados, de ahí la importancia del diseño del proyecto que se adopte, a partir de los resultados de la primera fase, pues estos análisis son necesariamente complejos y lentos. Por ello los resultados finales no estarán disponibles hasta finales del 2008.
En el trabajo relativo a las medidas superficiales sobre el terreno interviene personal altamente especializado en número reducido. En las determinaciones radioanalíticas en laboratorio participarán grupos científicos de reconocido prestigio en un número más importante.
Las características de los trabajos de investigación que se realizarán precisaban la expropiación de los terrenos y la dotación de una infraestructura básica (vallado, acometida eléctrica, agua y servicios). El objetivo de estas medidas es controlar el acceso y facilitar el trabajo de los técnicos. En resumen, estas actuaciones tendrán una duración aproximada de dos años. De esta manera, se determinarán con total precisión las estrategias a seguir para la futura recuperación de la zona.
El CIEMAT efectúa desde hace 40 años la supervisión continua de las personas y del medio ambiente en toda la zona, a través del Proyecto Indalo, mediante exámenes médicos y dosimetría interna por bioeliminación de la población y controles de muestras ambientales de todo tipo. En este tiempo, los valores obtenidos se sitúan en un rango de normalidad y no suponen riesgo radiológico significativo para las personas.
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