Antes del siglo XIX, cuando se construyó el Canal de Isabel II, la capital contaba con los 'viajes del agua'. Se trata de los antiguos sistemas de canalización que llegaron a extenderse por 140 kilómetros de las actuales calles de Madrid.
Este y otros vínculos de la metrópoli con el agua han sido el objeto de la visita especial. Este domingo fueron 90 personas las que tuvieron ocasión de conocer los secretos de la 'ruta del agua', que partió a las 16.00 de la Plaza Mayor rumbo a la calle de Segovia.
Por esta vía discurría en tiempos uno de los arroyos más importantes de la capital, el Matriz, que, junto a los dos Abroñigales y el Castellana constituyó en tiempos una de las principales canalizaciones de la ciudad, hasta que el pavimento terminó con él en el siglo XVIII.
En aquellos tiempos eran numerosos los madrileños que se ganaban la vida en oficios relacionados con el agua. Los aguadores de cuba se encargaban de vendérsela a los vecinos más adinerados. Los botijeros, que se la vendían a numerosos ciudadanos, la ofrecían al anís o a la vainilla, sabores que dependían de la trata especial del barro que requieren estos objetos. Por último, las aguadoras se paseaban con sus cántaras ofreciendo agua —y en ocasiones 'otros placeres'— a los madrileños de hace dos siglos.
La siguiente parada, en la Plaza del Biombo, mostró uno de los principales puntos de encuentro de las lavanderas de la ciudad, y conserva todavía una fuente con varios caños donde las madrileñas lavaban la ropa. Esta tarea también solía realizarse en los arroyos, si bien estaba prohibido hacerla —al igual que las 'aguas mayores y menores'— en sus partes altas, para evitar su contaminación desde el origen.
El agua también podía caer, si bien 'aderezada' con excrementos y otras impurezas, de cualquier ventana. El célebre grito de '¡Agua va!' no evitó que más de un viandante tuviera que limpiar su sobrecapa de cuero —hecha antiguamente de este material, y no de paño, por este motivo— para continuar su paseo en unas mínimas condiciones higiénicas.
La ruta concluyó, una hora y media después, rumbo a la plaza de Oriente, pasando por la de Isabel II, reina que presta su nombre al actual sistema de canalizaciones de la ciudad. La construcción del Canal fue recogida en un decreto de 1851, aunque la infraestructura no se estrenó hasta siete años después.
La ruta por los 'viajes del agua' de este domingo fue una oportunidad única, ya que no está prevista su repetición en la programación del Patronato de Turismo. Sin embargo, Marisol Usobiaga, directora de 'Madrid a tu alcance'
ya que 'Madrid a tu alcance' —entidad que gestionó la iniciativa— confirmó a Madridiario que podría repetirse de nuevo si algún grupo solicitara este recorrido en las oficinas del Patronato de Turismo.
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