Urosa rechazó también que dentro de este proyecto esté contemplado hacer que las clases de religión se eliminen o que, en su defecto, sean impartidas sólo fuera del horario escolar, basándose en el argumento de que Venezuela es un Estado laico según la Carta Magna.
"Se habla de Estado laico porque este no es un Estado teocrático, aquí no se obliga a la práctica de una religión como lo hacen en los llamados países islámicos. Esa es una concesión positiva, hay libertad religiosa. Pero no por ese motivo se debe suprimir la religión", explicó el arzobispo para quien las instituciones educativas son ideales para la formación del culto.
Impartir religión fuera del horario escolar sería, de acuerdo al cardenal, "sumamente incómodo y poco práctico". "Los alumnos tendrán que quedarse una hora o dos más y eso es matar la clase de religión".
"A Dios no podemos sacarlo de las escuelas. La religión en las escuelas es un derecho adquirido y está previsto en el artículo 59 de la Constitución y en la actual ley de educación. Esta le da fuerza moral al ser humano para vivir como hermanos en una sociedad como la venezolana", comentó.