El dirigente político, en declaraciones a la prensa, relacionó esos hechos con "el plan de desestabilización que impulsa Estados Unidos a través de Colombia", del que, a su juicio, también forma parte el acuerdo que permite la utilización de siete bases colombianas por parte de tropas estadounidenses.
Figuera dijo que el helicóptero que penetro en Venezuela estuvo acompañado por otros dos que permanecieron sin cruzar el límite fronterizo.
No especificó, sin embargo, si los 150 paramilitares regresaron a su país o permanecen en suelo venezolano, en el sector Caño Negro del estado Zulia, unos 750 kilómetros al oeste de Caracas.
"Denunciamos estos casos para que se realicen las investigaciones pertinentes", manifestó Figuera.
El dirigente del PCV consideró también que las acciones denunciadas responden a una política de "provocación" del Gobierno del presidente colombiano, Álvaro Uribe.
Esa provocación tendría por objeto, según Figuera, "generar una respuesta armada y un conflicto local que, en última instancia, serviría para justificar la intervención de Estados Unidos".