La discusión se ha centrado en un incidente que desconcertó a más de uno, empezando por el mismo Obama.
En la segunda parte de su discurso, el mandatario se refirió a "las mentiras" que se han dicho sobre su propuesta: "hay quienes afirman que nuestro esfuerzo de reforma asegurará a los inmigrantes ilegales. Esto, también, es falso. Las reformas que propongo no se aplicarán a quienes se encuentran aquí ilegalmente". Fue en ese momento cuando un senador republicano, Joe Wilson, representante de Carolina del Sur le gritó: "¡Usted miente!".
No habituados a este tipo de expresiones de protesta hacia un presidente, los congresistas lanzaron un sonido de sorpresa al tiempo que Obama interrumpía su discurso por un momento para voltear a ver al legislador.
En Estados Unidos, durante los escasos encuentros entre el presidente y el Congreso, las manifestaciones de inconformidad se manifiestan generalmente cuando los congresistas se abstienen de aplaudir el discurso presidencial, pero nunca se había visto una interpelación como la de este miércoles.
El grito de Wilson provocó el descontento hasta de sus mismos correligionarios. Durante una entrevista, el senador John McCain, quien contendió con Obama por la presidencia, calificó de "irrespetuosa y fuera de lugar" la protesta de Wilson, y consideró que "debería disculparse inmediatamente".
Horas después, el senador llamó a la Casa Blanca para ofrecer una disculpa, que hizo pública a través de un comunicado en su página de internet. Sin embargo, la expectación que causó el escrito provocó un tráfico excepcional de visitas al sitio que lo hizo colapsar desde ese mismo día.
En la misiva, Joe Wilson aceptó que se dejó llevar por las emociones, "mi comportamiento fue inapropiado y lamentable, espero que el presidente me disculpe por este fallo de civilidad".
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