El Jefe de Estado fue ovacionado varias veces por unas 8.000 personas compuestas por bolivianos, paraguayos, ecuatorianos, peruanos, chilenos, mexicanos, venezolanos y de otras nacionalidades que viven en España.
También había centenas de españoles que escucharon con atención las reflexiones emitidas por el primer mandatario sobre la política nacional, la democracia y también la situación internacional.
Diversos colectivos agrupados en movimientos de izquierda y de jóvenes ovacionaron a Morales desde su arribo al centro de concentración.
Morales se refirió a diversos asuntos de la democracia boliviana y destacó la nueva Constitución Política del Estado que es considerada como una de las más avanzadas del mundo por las propuestas políticas, sociales y económicas que incorpora.
También hizo un llamado a los países industrializados para que apoyen con decisión las políticas de cuidado del medio ambiente y con el fin de respetar los derechos de la madre tierra como el factor principal para la sobrevivencia de la humanidad.
El tema de las migraciones latinoamericanas a países europeas y a Estados Unidos fue motivo de preocupación del Jefe de Estado por la imposición de drásticas medidas de control en esas regiones que los consideran ilegales y hasta los expulsan de su territorio.
Dijo que cuando los abuelos de las actuales generaciones de Europa llegaron a América Latina fueron recibidos con los brazos abiertos y en ningún momento se los consideró como ilegales o indocumentados.
En su discurso el presidente llamó la atención de la comunidad internacional para impedir la instalación de bases militares de Estados Unidos en territorio latinoamericano por constituirse una violación a la independencia y soberanía de los pueblos, además de poner en riesgo la paz.
El Jefe de Estado destacó la nacionalización de los hidrocarburos dispuesta el pasado uno de mayo de 2006 y el despegue económico de Bolivia, además de la recuperación de la dignidad y soberanía nacionales.
Dijo que el Gobierno ha iniciado una lucha para reducir los niveles de pobreza extrema en el país para que los bolivianos accedan a mejores condiciones de vida y de oportunidades.
Los organizadores del evento entregaron al Primer Mandatario un águila de parte de los movimientos asociacionistas de España.
El acto fue cubierto por decenas de periodistas, fotógrafos y camarógrafos de medios de comunicación españoles e internacionales.
Morales cumplirá el lunes y martes una intensa agenda de reuniones con autoridades gubernamentales, representantes del empresariado y de las universidades. También tiene previsto encuentros con líderes de los movimientos sociales de las comunidades latinoamericanas en España.
El lunes será recibido por el Rey Juan Carlos en el Palacio de La Zarzuela y por el Congreso de Diputados. En la noche será homenajeado por una cena en su honor ofrecida por los monarcas de España.
El martes se reunirá en el palacio de la Moncloa con el presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero para analizar diversos asuntos de interés bilateral y acuerdos complementarios de cooperación.
El presidente Morales llegó la noche del sábado a Ginebra, Suiza, para reunirse con los principales ejecutivos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) para conocer las posibilidades de que Bolivia tenga un satélite propio.
El portavoz oficial de la Presidencia, Iván Canelas, dijo que la reunión fue exitosa porque la UIT anunció que Bolivia podrá contar con su propio satélite en el curso de los próximos dos o tres años.
El satélite boliviano, que se llamará Tupac Katari, en homenaje al líder indígena que luchó por la independencia en el siglo XVIII, demandará un desembolso de 300 millones de dólares, pero sustentará una serie de programas de desarrollo de Bolivia.
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