'Caso Haidar': Moratinos se da por vencido con Marruecos y confía en la ONU

En una rueda de prensa desde el aeropuerto de Lanzarote, donde se encuentra la activista saharaui desde el pasado 14 de noviembre, Santos subrayó que hoy "se ha pasado página" en la búsqueda de una resolución para este conflicto diplomático. No obstante, dijo que el Ministerio de Asuntos Exteriores espera aún una respuesta a una nota verbal presentada en la Embajada de Marruecos en la que ha solicitado "de manera formal y escrita" que el Gobierno de este país dote de documentación a Haidar para regresar a El Aaiún.

   En este sentido, abogó por explorar "nuevas vías" de solución dentro del derecho español y también atendiendo a la mediación de los organismos internacionales, teniendo en cuenta que Marruecos es el "país soberano" que decidió la "expulsión" de Haidar y que, además, "administra de facto el territorio del Sáhara Occidental" al que quiere retornar la defensora de los Derechos Humanos del pueblo saharaui.

   De esta forma, España considera que no hay ninguna posibilidad para que Marruecos acepte el retorno de Haidar en base a la información proporcionada por una delegación parlamentaria marroquí encabezada por el presidente de la Cámara de Consejeros (equivalente al Senado español) y secretario general del partido Autenticidad y Modernidad (PAM), afín al rey Mohamed VI, Mohamed Cheij Biadillah.

Una fase agotada

"Hemos agotado una fase", insistió el jefe de Gabinete del ministro Moratinos, quien dijo valorar positivamente las declaraciones a favor de hallar una solución diplomática que permita el retorno de Haidar del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos, Navi Pillay, y de la Agencia para los Refugiados (ACNUR), todas ellas por mediación de las autoridades españolas. Esta posición internacional también cuenta con el respaldo del Consejo de Europa, quien ha criticado que Marruecos "confiscara" el pasaporte de la activista saharaui.

   Exteriores considera inviable que se alcance un acuerdo porque Marruecos supedita éste a unas "condiciones políticas" que pasan por que Haidar pida perdón y reconozca su marroquinidad, algo a lo que se opone la activista pro-Derechos Humanos. En este sentido, Santos recordó que España mantiene su oferta para que Haidar obtenga el pasaporte español o que se acoja al estatuto de asilo y refugio, algo que rechaza igualmente alegando que le "cerraría la puerta para el retorno a su país", el Sáhara Occidental.

   Santos, que destacó las buenas relaciones que continúan existiendo entre España y Marruecos, dijo que el objetivo del Gobierno sigue siendo que Haidar vuelva a El Aaiún, ya que comparte con la activista saharaui que han sido "violados sus derechos al ser expulsada" y que la solución pasa por una "negociación diplomática" que conlleve su regreso.