www.diariocritico.com
Angostura

Angostura

lunes 21 de diciembre de 2009, 17:41h

El aforismo popular, cargado de tanta sabiduría, dice que “si quieres que no se conozca nada, cuando se investiga algo, nombra una comisión”; sin embargo con la entrega del informe de la Comisión nombrada por el señor Presidente, para que se investigue sobre el ataque por parte de Fuerzas Armadas colombianas al campamento de Angostura, asentado en suelo ecuatoriano, el 1º de marzo del 2008, en donde murió uno de los líderes más importantes de las FARC “Raúl Reyes” y más de una veintena de insurgentes; ha permitido conocer unos pocos detalles inéditos, otros se han confirmado de lo que en gran medida, al menos la mayoría de ecuatorianos “sospechábamos” y una gran parte del informe, por sus inconsistencias, ligereza o falta de pruebas, todavía queda por aclararse.

En todo caso hay que reconocer que la Comisión, estuvo abocada a muchas dificultades y obviamente a riesgos, no hay que olvidarse que la Comisión, tenía por delante un peligroso campo minado: las fuerzas irregulares, los narcotraficantes, autoridades civiles y militares; asambleístas, gobiernos de países que se sospechaba que intervinieron y un largo etcétera, todos los nombrados eran susceptibles de ser involucrados y como era lógico pensar, se esperaba que  reaccionen de diferentes formas.

Con los dos países, Ecuador y Colombia, sin relaciones diplomáticas; ¿cómo se podía recabar información?, sin tener representación diplomática, sin agregados militares y policiales; suspendida la Comisión Binacional Fronteriza (Cobifron); además, los órganos de inteligencia ecuatorianos -militares y policiales- deliberadamente desarticulados y en proceso de reorganización, era un trabajo, por decir menos, cuesta arriba.

Si bien es cierto, se establece con nombres los ex-funcionarios de este régimen que tuvieron nexos con las FARC, sin embargo, contradicción, se le libra a este gobierno de estar involucrado en este malhadado suceso; igualmente sin las pruebas suficientes se establece que EE.UU. a través del FOL, desde la base de Manta apoyó al ataque.

Se debió condenar la temeraria denuncia hecha por una de las guerrilleras sobrevivientes (Morett), que acusó a miembros de nuestro Ejército, que la torturaron; todo lo contrario, recibió un trato humanitario inmenso, además; el gobierno permitió que a ella y a las otras sobrevivientes se les facilite su salida del país con la ayuda de Nicaragua.

De los resultados del trabajo de la Comisión, aún queda mucha tela que cortar; en todo caso la Fiscalía de inmediato debe tomar cartas en el asunto y sin tapujos tiene la obligación de investigar y establecer los autores, cómplices y encubridores, y de confirmarse el involucramiento de los sospechosos, éstos deberán ser procesados y sancionados con todo el rigor de la ley.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios