Así las cosas, el debate nacional es ése: si el Comité de Competición de la Federación que preside
Villar, siempre acusado por sectores del madridismo como un enemigo para el club, asestará un golpe a la moral de
Cristiano Ronaldo. El portugués rompió la nariz a su rival del Málaga
Mtiliga en un lance del juego pero no es la primera vez que es expulsado por excederse en sus movimientos.
El caso es que se ha convertido en un debate nacional y la prensa madrileña y catalana se enfrenta ante lo que parece cuestión de Estado. El diario
AS, por ejemplo, publica en portada un despliegue fotográfico que intenta comparar dos casos con resultados adversos:
Messi zafándose de igual manera de un rival del Sevilla, en una acción que quedó sin sancionar, y el caso de Ronaldo, que acabó en el vestuario tras ser agarrado por el malaguista Mtiliga.
Por su parte, el
Marca también da su primera al luso, recogiendo declaraciones exclusivas del delantero:
"Sólo quiero que me dejen jugar", dice Ronaldo, insistiendo en que la expulsión fue rigurosa y en que no quiso hacer daño a su contrario, sino sólo quitárselo de encima tras ser agarrado por detrás. Es cierto que el madridista no sabía en ningún momento dónde estaba Mtiliga, que le sujetaba desde detrás.
También
Marca recoge el mismo momento que AS retrata en su portada: la agresión que Messi realizó a un rival sevillista hace unos días (la foto se puede ver junto sobre estas líneas).
Y como era de esperar, la prensa catalana, se vuelca de forma contraria. Considera que Ronaldo es un jugador conflictivo y espera que la sanción sea severa para dar ejemplo.