El Fondo Monetario Internacional pronostica que el Perú crecerá 6,5% este año

Para el FMI, la inversión pública en infraestructura y proyectos de mantenimiento probó ser efectiva para ayudar a sostener la demanda interna y el empleo. Incluso, aun con la tasa de referencia del Banco Central de Reserva (BCR) en 1,25%, este tiene espacio para implementar medidas no tradicionales, pero que involucren inyecciones de liquidez si la aversión al riesgo recrudece y las condiciones financieras empeoran.

Sin embargo, más adelante en el mismo reporte, el FMI señala que para poder enfrentar una recaída de las condiciones internacionales, el Perú debe recobrar la estabilidad fiscal (eliminar el déficit), así como su capacidad de ahorro que le proporcionó el espacio y la credibilidad para lanzar un plan de estímulo económico como el del 2009 sin que ello impacte en las tasas de interés.

FUERTE CRECIMIENTO
El reporte reitera la proyección de crecimiento de 6,5% para la economía peruana e insiste en que las fortalezas del Perú en el plano macroeconómico que le permitieron capear la crisis (consistencia y prudencia en las políticas fiscales a través de los años) surtirán un efecto positivo en la economía.

Según lo espera el organismo internacional, el crecimiento impulsaría el remanente del plan de estímulo económico en el primer semestre y para la segunda mitad del año tomaría la posta la inversión privada local y extranjera.

No obstante, también reconoce que un punto clave será la oportunidad y forma en la que se vayan retirando los estímulos fiscales y monetarios para evitar que se produzcan presiones inflacionarias.

ASUNTOS ESTRUCTURALES
El FMI saludó la intención del Perú de llevar a cabo una “ambiciosa reforma estructural para preservar el alto crecimiento en el mediano plazo”. También señaló que el desarrollo del mercado de capitales es crítico para “canalizar los recursos hacia la formación de capital”, a la vez que reconocía que la demanda de instrumentos de inversión ha crecido muchísimo más que la oferta.

Mencionó que fortalecer el fondo de estabilización del precio de los combustibles y hacerlo autosostenible mejoraría su efectividad y reduciría el riesgo fiscal.