Lopera, tras la venta del Betis: "Complazco a muchos grupos opositores"

   Junto a varios de sus directivos, Lopera compareció en rueda de prensa en el estadio que lleva su nombre, junto al empresario navarro Luis Oliver, en representación de la firma 'Bitton Sport', compradora de sus acciones, y que avala la operación.

  "Vengo a anunciar que la sociedad Farusa ha vendido las acciones que tenía en el Real Betis Balompié a la sociedad Bitton Sport. Es el 51 por ciento de sus aciones, porque los señores éstos vienen a reforzar el club, según ellos me dicen, y a hacer un Betis grande que tire para arriba. Los veo con muchas ganas y espíritu y hemos visto conveniente realizar esta operación", explicó.

   Igualmente, destacó que tras esa venta a Farusa le queda el 1 por ciento de las acciones más lo que tiene él como particular. "Soy un accionista minoritario más de los muchos que hay. Los señores que llegan han visto las cuentas y son conocedores de todo. De esta manera voy a complacer a muchos grupos opositores que constantemente han estado diciendo 'Lopera, vete ya'", se lamentó.

   En este punto, dejó caer qué ha pretendido con esta venta. "Los he complacido con el primer comprador que ha llegado y, a lo mejor, algún día se echa de menos a Lopera, porque soy bético desde pequeñito y no vengo de ningún país lejano a España. Pero ahora hay muchos que están diciendo que voy a arruinar al Betis si me voy", sentenció.

   Así, tras repasar su estancia al frente del club, en el que, aseguró, "nunca se ha devuelto un pagaré a nadie" ni se le debe "ni un sólo euro atrasado a ningún club del fútbol mundial", pese a haber gastado "cientos de millones de pesetas en jugadores".

  "Estamos al día con todos los aplazamientos que nos concede Hacienda. Tenemos avalados más de 30 millones a 5 de junio, Con mis avales y mi esfuerzo hemos pagado desde el 1 de julio de 2009, cuando el Betis entró en Segunda, más de 46 millones de euros, cerca de 8.000 millones de pesetas en Segunda División", recalcó.

   Al mismo tiempo, recordó que ningún grupo opositor ha apostado por comprar el club. "Sólo mandan a los seis ó siete que tienen en la puerta", dijo sobre los aficionados concentrados ante el estadio, y que gritaban consignas contra él. "Nadie le reclama nada en los juzgados al Betis y, si Lopera llega a seguir esta temporada porque no lo lleguen los compradores, sigo avalando los seis o siete mil millones. Pero a lo mejor se pueden acordar de Lopera", comentó.

Fichajes paralizados

   Paralelamente, lamentó la "mala suerte" deportiva de los dos últimos años. De todos modos, desveló que Víctor Fernández está a la espera de que se le traigan los jugadores que ha pedido, que era lo que él esperaba para renovar como entrenador del Betis, aunque deberá negociar con los nuevos propietarios, quienes también decidirán sobre tres jugadores que ya estaban apalabrados.

   Igualmente, Lopera, que mantuvo en todo momento un tono autoreivindicativo y agorero, aseguró que el club tiene más de 9,3 millones de euros de reservas en el banco, más los abonos de la presente temporada. También dijo que el estadio del Betis podrá dejar de llevar su nombre, cuando los nuevos propietarios "terminen de pagar la operación" de compra-venta.

  Sin hacer autocrítica en ningún momento, Lopera, que se manifestó "muy tranquilo" sobre la declaración como imputado que debe hacer el próximo 14 de julio por un presunto delito societario, dijo que lo único de lo que se arrepiente es "de haber traído a algunos entrenadores a los que, a lo mejor, no les han salido bien las cosas".

   Por último, Lopera, que le cierra la puerta un regreso" tuvo unas palabras para la hinchada albiverde. "Me despido con una pena muy grande. Le doy un fuerte abrazo a todos mis aficionados y les pido que apoyen a estos hombres y al Betis pero si este año hubiéramos estados todos a una habríamos terminado la Liga con 6 puntos más. Quiero el mayor triunfo para mi Betis de mi alma", concluyó.

18 años al frente del club

   El anuncio formulado por Manuel Ruiz de Lopera de la venta de sus acciones al grupo Bitton Sport, representado por el empresario navarro Luis Oliver, pone punto final a un periodo de 18 años, con pocas luces y muchas sombras, en los que el dirigente ha controlado, de forma directa e inapelable, los destinos del centenario club sevillano.

   De hecho, los béticos que acaben de alcanzar la mayoría de edad no han conocido otro mandatario al frente de la entidad heliopolitana que Lopera, desde que éste se hiciera con la mayoría de la naciente sociedad anónima deportiva allá por junio de 1992. Fue aquel un proceso cuyos ecos, llenos de polémica incluso judicial, aún resuenan, pero que le permitió pasar a Lopera, durante muchos años, por salvador del Betis.

   Durante estas casi dos décadas Lopera ha alcanzado unos escasos logros, sintetizados en dos ascensos a Primera División (1994 y 2000), un título (2005) y un subcampeonato (1997) de Copa del Rey.

   Por contra, bajo su dirección el equipo ha sufrido dos descensos a Segunda, incluido el que mantiene al equipo en la 'categoría de plata' desde el año pasado y, sobre todo, ha experimentado un deterioro económico cuya cuantía real se desconoce, sin olvidar el descrédito encajado por la imagen del Betis, por las formas poco o nada diplomáticas con las que se ha conducido Lopera a menudo con amigos y adversarios.

   A ello hay que unir la profundísima sima que se ha abierto entre Lopera y el beticismo, que desde hace un lustro no se ha cansado de pedir su marcha. Ello se sintetizó en la multitudinaria manifestación que sacó a 70.000 béticos a las calles de Sevilla, el 15 de junio del año anterior.

   Por si fuera poco, Lopera, que ya fue condenado en 2006 por dos delitos fiscales en 2006, debe hacer frente a una demanda por presunto delito societario, por la que comparecerá, como imputado, el próximo 14 de julio, ante el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla.

   Sea como sea, y dados los precedentes, jalonados de diversas 'ventas fantasma', habrá que esperar para comprobar si, realmente, esta vez ha terminado la 'era Lopera' en el Betis. Sobre todo, teniendo en cuenta que el Consejo Superior de Deportes no ha recibido aún la documentación pertinente de esta supuesta operación.

   Por último, cabe señalar la gran incógnita que representa Luis Oliver, un hombre cuyas andanzas futbolísticas en Jerez y Cartagena no han derivado, precisamente, en éxitos, y que desde hoy mismo estará bajo la lupa de toda una afición cansada de despropósitos.