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El presidente de México, Felipe Calderón, reiteró que los problemas por inseguridad y crimen organizado en el país serán llevados a debate en audiencias estatales conducidas por organizaciones civiles.
Según explicó, la idea es promover la participación ciudadana en el diagnóstico de la situación en cada uno de los estados y la presentación de propuestas para perfilar la estrategia nacional de seguridad interna.
En momentos, dijo, en que el crimen organizado alcanzó niveles sin precedentes y amenaza de manera creciente la tranquilidad de las familias y el patrimonio de las personas.
También atenta contra los medios de comunicación y a las instituciones democráticas, estimó el mandatario en reunión con académicos y otros expertos, a quienes pidió ayuda en la búsqueda de soluciones.
Este fue el segundo encuentro convocado por Calderón para discutir el tema durante la presente semana, ayer se reunió con dirigentes empresariales y de organizaciones gubernamentales.
El jefe del Ejecutivo reiteró que continuará el diálogo con partidos políticos, legisladores, representantes del poder judicial y otros actores, ante la necesidad de poner coto a la violencia y la criminalidad.
Sobre los intercambios realizados, destacó la existencia de consenso sobre la obligación de fortalecer la institucionalidad del país y los planes gubernamentales para recomponer el tejido social.
Es preciso, reconoció, mayor eficacia de ministerios públicos, policías, jueces y gobiernos locales frente a la delincuencia.
Pero junto a ello, afianzar programas de salud, educación, recreación, cultura, de fomento a la legalidad que permitan soluciones de fondo, a fin de restar bases al crimen organizado y al delito en general.
Otro punto de coincidencia, indicó, es la necesidad de hacer funcionar mecanismos de control, de forma tal que los ciudadanos pueden exigirle a sus gobernantes en todos los órdenes del gobierno.
Calderón solicitó a los académicos y expertos contribuir al diagnóstico de los problemas y la evaluación de la estrategia, así como en el debate que se abrirá a escala territorial.
El jefe del Ejecutivo federal llamó a poner por encima de cualquier consideración los intereses de la nación y aseguró que su Administración está dispuesta a escuchar, analizar y revisar cuánta sugerencia y crítica sea planteada en materia seguridad y combate al hampa.
"México requiere una política de seguridad que trascienda a una administración y que garantice un entorno de leyes y justicia para los mexicanos",subrayó.
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