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Licitación 21, transparente y con apego estricto a la Ley

Se abre espectro para servicios de  telefonía móvil de última generación

Se abre espectro para servicios de telefonía móvil de última generación

martes 24 de agosto de 2010, 02:13h

Se abre espectro para servicios de  telefonía móvil de última generación Con la licitación 21 se pone a disposición de los consumidores un bien de dominio público que es esencial para el desarrollo económico de la sociedad. Los 60 Megahertz de la banda de 1.7 Gigahertz del espectro radioeléctrico que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Comisión Federal de Telecomunicaciones licitaron serán utilizados por las empresas ganadoras para ofrecer más y mejores servicios de telefonía móvil de última generación.

Cuando las nuevas redes móviles se desplieguen y entren en operación, los consumidores podrán constatar una baja en los precios así como un incremento en la calidad de los servicios. También los mexicanos podrán disfrutar de una cobertura más amplia de sus servicios de telecomunicaciones. De esta manera se generarán mejores condiciones de competitividad.

En el diseño del proceso de esta licitación, además de la SCT y COFETEL, participaron la Comisión Federal de Competencia (Cofeco) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Tres objetivos guiaron su diseño desde su origen: 1) evitar una acumulación excesiva y anticompetitiva del espectro radioeléctrico, 2) permitir que los operadores actuales consoliden sus posiciones y satisfagan la demanda creciente de sus usuarios y 3) estimular la entrada de por lo menos un nuevo competidor a nivel nacional. Con base en lo anterior, se estableció el límite de 80 Megahertz de acumulación de espectro para las empresas participantes y se dividió la banda a licitar en tres bloques de 10 Megahertz regionales a los que tuvieron acceso tanto los operadores actuales como los entrantes.

Al mismo tiempo se abrieron, exclusivamente para nuevos competidores, dos bloques nacionales de 30 Megahertz (uno de los cuales tuvo que ser declarado desierto ya que no recibió oferta alguna).

Este diseño de licitación permitió tener un proceso competido que garantizó, en cada uno de los 28 bloques que recibieron propuestas, que el estado mexicano recibiera un precio justo por el bien licitado. El 18 de julio de 2010, la COFETEL dio por terminado el proceso de puja, después de 77 rondas, donde las posturas económicas válidas más altas fueron hechas por Telcel, Telefónica y Nextel/Televisa y suman un total de 5 mil 248 millones de pesos.

Las empresas ganadoras deberán pagar al estado tanto el monto ofrecido en la subasta como los derechos anuales, por el periodo de 20 años, tiempo de vigencia de la concesión, que establece la Ley Federal de Derechos en su artículo 244 B y E. Este pago de derechos representa la mayor parte de los ingresos públicos por el arrendamiento de este bien de dominio de la nación. Es así que el monto total que recibirá el estado por estas concesiones supera los 19 mil 500 millones de pesos:

Nota  la tabla muestra el precio por bloque incluyendo el pago inicial (guante) y los derechos anuales por 20 años traídos a valor presente. En los cálculos ya se contempla la exención del pago de derechos que aprobó el Congreso de la Unión.

Además de los pagos que por ley las empresas ganadoras realizarán al estado mexicano, se espera que en el despliegue de las nuevas redes de telecomunicaciones móviles se inviertan grandes sumas de dinero en los próximos años. Por ejemplo, tanto Telcel como Telefónica invertirán alrededor de 2 mil millones de pesos cada una en la consolidación de sus respectivas redes.

Por su parte, en el plan de negocios que Nextel/Televisa entregó a COFETEL se tiene proyectado una inversión del orden de los 19 mil millones de pesos en un lapso de 5 años para el despliegue de una nueva red nacional, lo que por supuesto se traducirá en un desarrollo tecnológico de importancia, un aumento en la cobertura de los servicios, así como en la creación de nuevos empleos.

La licitación 21, desde su diseño hasta su fallo final se llevó a cabo en escrupuloso apego a la ley y normatividad vigentes, y se trató de un proceso transparente e inclusivo, que contribuye a poner a México al día en materia de telecomunicaciones. El compromiso de este gobierno con el impulso de la competencia, la cobertura y la convergencia en el sector ha sido y seguirá siendo firme, constatando el trabajo diario con hechos y logros concretos.


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