Siete entidades aprueban unirse para crear la mayor caja española

El 97,90 por ciento de los participantes en la asamblea extraordinaria de Caja Madrid -326 votos a favor y siete en contra- decidió apoyar la fusión de las siete cajas a través de este sistema, por el que nacerá una nueva entidad con la forma jurídica de un banco que empezará a funcionar en enero de 2011.

Las asambleas del resto de las entidades suscribieron con porcentajes similares de participación la unión, que ha requerido una ayuda de 4.465 millones de euros al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

En Bancaja votaron a favor 180 de los integrantes de la asamblea, el 98,3 por ciento, y tres en contra, los representantes del sindicato CGT y Esquerra Unida (EU), mientras que la asamblea de Caja Canarias arrojó un resultado de 124 votos a favor, el 90,51 por ciento de los votos, siete en contra y dos abstenciones.

La asamblea de Caixa Laietana aprobó por unanimidad la integración (votaron más de 70 miembros), en tanto que en Caja Ávila el respaldo fue del 96,8 por ciento, con 93 votos a favor, y 3 abstenciones (Izquierda Unida), mientras que los 22 representantes del PSOE no asistieron.

Los representantes de Caja Rioja suscribieron la integración con el 97,8 por ciento de los votos -90 a favor y dos en contra, que podrían ser del Partido Riojano, que anunció su rechazo a la fusión, y diez abstenciones-, y en Caja Segovia la fusión recibió 112 votos a favor, el 95,6 por ciento, uno en contra y cuatro abstenciones.

El presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, dijo que este tipo de uniones sirve para mejorar el acceso de estas entidades a los mercados y adecuar su dimensión, además de destacar que creará un "campeón nacional", una entidad "más sólida, más grande, más eficiente y diversificada".

Rato también indicó que esta integración creará la primera entidad española en banca comercial y de empresas por volumen de negocio, con 355.613 millones de euros, además del primer grupo de cajas de ahorros en Europa y uno de los quince mayores de la zona euro.

El presidente de Caja Rioja, Fernando Beltrán, dijo que la fusión "permite mantener la marca, la personalidad, la obra social y la red minorista" de la entidad, aunque tendrá que cerrar alguna oficina, aunque matizó que "no hay un cálculo exacto" de cuantos trabajadores perderán su trabajo.