El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, explicó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que las novedades que incluye la reforma se centran en las "medidas preconcursales", que facilitarán las propuestas anticipadas de convenio de acreedores y los acuerdos extrajudiciales de refinanciación para evitar la insolvencia definitiva de las empresas.
En este sentido, las entidades financieras podrán imponerse a los acreedores minoritarios cuando representen más del 75% del pasivo de la empresa y la compañía en dificultades cuente con un proyecto de viabilidad aprobado por un experto independiente y homologado por el juez.
Caamaño señaló que esta reforma se emprende para favorecer la relación entre "la economía y el sistema judicial", así como para "ahorrar costes, de agilidad, seguridad jurídica y activar la respuesta económica del país ante la crisis".