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Las nucleares niponas, en la campaña

lunes 14 de marzo de 2011, 11:52h
De momento, y contra todo pronóstico, la  precampaña electoral sigue teniendo materias extraelectorales, como la eventual candidatura de Zapatero o de sus alternativas, y si en la campaña participará, y  cuánto, el presidente Zapatero, o sólo los “presidentes barones”. Ha surgido otro elemento mucho menos imaginable: la cuestión nuclear. Viene de Japón, y llega “a contramano”: Japón es más nuclear que la mayoría de los países, pero el terremoto y el tsunami han puesto sobre el tapete de las urgencias la necesidad de afrontar la muy peliaguda cuestión de la seguridad de las centrales. De tres centrales, nada menos, que han estado o están fuera de control y con severísimos riesgos para la ciudadanía que vive en su entorno. De repente, los temores, suspicacias y recelos del programa socialista contra “lo nuclear”, en últimos años en entredicho y muy  atacados por todos los adversarios, han pasado a tener una extraordinaria actualidad y vigencia. La cancillera Merkel reclama seguridad a sus centrales, y se supone que Sarkozy se añade a los preocupados dirigentes con central a la vista… Ahora, cualquier día, González Pons y Rajoy nos sorprenden adhiriéndose a las suspicacias antinucleares de Zapatero, quién lo habría dicho… Pero, de momento, lo que se lleva es una especie de “programación electoral a ciegas”,  en lo que concierne a la decisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre su futuro. Es la situación que ya parece haber asumido el comité electoral del PSOE, según cuenta El País, que habría empezado a elaborar la programación de actos de Zapatero para los comicios autonómicos y municipales del 22 de mayo barajando "todos los escenarios posibles". Es decir, que el presidente comunique sus planes en torno a la candidatura para 2012 este mes o el próximo, o que mantenga la incógnita hasta después de las elecciones locales y regionales. Y mientras tanto, surge alguna hipótesis nueva, como la que aporta El Mundo, al incluir en la carrera electoral a un nuevo candidato socialista: a Zapatero, Rubalcaba, Chacón y Bono, añade a Javier Solana, y o sitúa por detrás de Rubalcaba y Bono, pero por delante de Chacón y del propio Zapatero. Buen juego hemos inventado para esta campaña, que parece aborrecer de otras cuestiones, como las dimensiones del estado autonómico, la transparencia en el gasto  público o el grado de cooperación del PP en las medidas para salir de la crisis. Todo eso parece resultar ingrato a unos o a otros.  El comité electoral socialista, que dirige José Blanco, con el acuerdo de Zapatero, es consciente de que la indecisión y ambigüedad actuales no puede ser duradera, y que, sin tardanza, debiera determinar nombres y candidatos tanto para las elecciones de mayo como para las de marzo siguiente… Se sabe, por ejemplo, que Zapatero ya ha dado el visto bueno a su participación el próximo 3 de abril en un mitin en Cartagena para apoyar a la candidata a la presidencia de Murcia, Begoña García Retegui. Será su primer acto de precampaña, que sustituirá al habitual mitin de Vistalegre. El siguiente será en Madrid, el 10 de abril, con el candidato Tomás Gómez, y un fin de semana después estará en Albacete con el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda. Quiere demostrar el PSOE que es cierta la explicación que se ha dado para anular el acto de Vistalegre, en el que Zapatero habría estado rodeado de todos los candidatos autonómicos y de los principales aspirantes a alcaldes. "Queremos promover una campaña municipal y autonómica centrada en los candidatos y en sus territorios", insisten los socialistas para justificar la decisión. Y también argumentan que conviene celebrar muchos actos locales y no uno grande en Madrid, que nada aporta a la campaña del aspirante a alcalde o a presidente. Nos interesa más la prensa regional que la nacional". Pero esa estrategia no impedirá la presencia de Zapatero en muchos lugares de España, como aseguran José Blanco, la portavoz del comité electoral, Elena Valenciano, y el secretario de Organización, Marcelino Iglesias. Pocos parece que quieran entrar en la gran cuestión de si la presencia de Zapatero resta o añade a la campaña y a cada candidato. Se asegura que la animadversión es “contundente” en Castilla-La Mancha, -Barreda parece el líder de la contestación interna-, en Murcia, en Valencia y en Madrid, pero no tanto en el resto de las comunidades. Incluso en alguna de ellas se discute esa exclusión del “líder a semi-debate”. Sorprende, sin embargo, que se impongan algunos recelos de unos pocos caudillos  a los ataques cerrados de la oposición popular. Veremos en qué queda esta discusión interior…
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