Off the record - 19 junio 2007

HISPASAT, A PUNTO DE HABLAR FRANCÉS

Decíamos ayer… o hace pocos días que conviene hablar un poquito de HISPASAT y EUTELSAT, porque algo está sucediendo que, en sector tan sensible, no debe pasar desapercibido a la opinión pública general. HISPASAT no es cualquier cosa, porque el sistema español de comunicaciones por satélite, aunque sólo fuera por lo que afecta a las comunicaciones gubernamentales y a la conexión con Latinoamérica, es obviamente estratégico.

Muchos piensan que se está entregando el control de HISPASAT al tandem formado por EUTELSAT y Abertis, pero esta última tiene algo menos del 32% en EUTELSAT, lo que por cierto supuso para Abertis un importante desembolso de 1.070 millones de euros, de los que al 12 de enero último había perdido 93,7 millones por caída de la acción. Luego vinieron los rumores a “calentar” la acción y el valor de la participación de Abertis no sólo recuperó lo perdido sino que ganó 230,9 millones. Nada es impone en estos asuntos.

Parece que, a diferencia de lo que sucede con el gobierno español e HISPASAT, el gobierno francés se toma muy en serio el carácter estratégico de EUTELSAT. Así, su presidente ejecutivo, el inefable Giuliano Berretta, tiene una confortable posición de poder con el 48 % que suman las participaciones controladas por el gobierno francés y gran parte del Free float, que representa el 20,03 %. La posición de Abertis es por tanto claramente minoritaria.

Razón de más para que se viera con prevención la entrada de Abertis en el capital de HISPASAT, que es lógica desde el punto de visto de Abertis, naturalmente interesada en revalorizar su participación en EUTELSAT, pero que supone poner la estratégica empresa española bajo el control de la estratégica empresa francesa, y precisamente por esa condición estratégica de ambas, desplazar las decisiones hacia los intereses del Gobierno francés.

EL “CAPITAN GARFIO” COMO SOCIO

Para no andar con muchos rodeos, la toma de control de HISPASAT por EUTELSAT, aunque sea parcialmente a través de Abertis, supone inevitablemente más valor para la francesa EUTELSAT y menos valor para la española HISPASAT. El análisis del período desde la entrada de la francesa en la española en 2001 lo confirma de forma reiterada y abrumadora.

¿Algunos ejemplos? Sobran. Ya en 2001 se incumplió el compromiso de inversión para el desarrollo del proyecto Amazonas-1. En 2002, EUTELSAT utilizó en su propio beneficio la capacidad de la española para negociar con fabricantes, lanzadores y aseguradores. En 2005 fue escandalosa la intentona de dejar a la española sin responsable ejecutivo, lo que hubiera supuesto obviamente un caos de gestión. E incluso en este año de 2007 son palmarias las dificultades al desarrollo del Plan financiero de HISPASAT.

Todavía se recuerda que el año pasado la francesa dificultó la definición de la configuración del satélite Amazonas-2, en un visible intento de paralizar el plan de crecimiento de la española. Al mismo tiempo se han hecho intentos de transferir a EUTELSAT clientes generados por la calidad de servicios de HISPASAT. ¡Qué socio, señores!

Y por si fuera poco, como el crecimiento de HISPASAT se sustenta en la autofinanciación, el animoso socio EUTELSAT insiste en endeudar la española para repartir dividendos. La francesa tiene un objetivo nítido, que consiste en integrar HISPASAT para mejorar sus ratios de crecimiento y dulcificar su ahora poco presentable ratio de deuda. Es de sentido común que los intereses de HISPASAT deben ser los diametralmente opuestos. ¿Nada tiene que decir de todo esto el actual Gobierno español o es que ha renunciado a hablar de tu a tu con el Gobierno francés, antes por disciplina, ahora por falta de feeling?

HACIENDO AMIGOS POR EUROPA

Esto de entregar joyitas al control de gobiernos extranjeros parece ya una manía del actual Gobierno. Se entrega la primera eléctrica española a ENEL, que no es una empresa europea así sin más, sino que es una empresa bajo control del Gobierno italiano, en cierto modo, una empresa pública italiana. Y se entrega el gran éxito de HISPASAT a EUTELSAT, que no es un empresa europea así sin más, sino que es una empresa bajo control del Gobierno francés, en cierto modo, una empresa pública francesa.

PONER EN VALOR HISPASAT

Los lectores más sanamente escépticos, esto es, más intelectualmente resistentes a la truculencia que todo esto sugiere, pensarán quizá que HISPASAT es una “patata caliente”, abocada a las pérdidas o a la inviabilidad. Bueno, pues veamos los números.

Entre 2004 y 2006 los ingresos de explotación de HISPASAT crecieron el 42,8 % y el beneficio neto, nada, una fruslería, el 1001,4 %. Caramba, parece que esto funciona. Y no hacen falta muchos argumentos para el carácter políticamente estratégico de la empresa, no sólo ante la Unión Europea, sino también hacia América y especialmente Latinoamérica, y quién sabe si en un futuro cercano también hacia África.

Así que verde y con asas, botijo. EUTELSAT “españoliza” su intento de hacerse con HISPASAT mediante Abertis, mientras “calienta” su cotización a base de generar la expectativa de que está a punto de integrar HISPASAT. Desde la óptica de la francesa es precioso. Y además, el Gobierno español, tan intervencionista en temas empresariales, silba y mira al tendido. ¿O es que acabará apareciendo alguna “mano semi-política” por debajo de todo esto? ¿O se trata –esto ya es humor, naturalmente– de guardar los equilibrios, y ya que se da una empresa estratégica al Gobierno italiano, dar otra al Gobierno francés, para evitar celillos?

CANARIAS, GOBIERNO A PUNTO DE ACUERDO

En acuerdos o negociaciones políticas nada es seguro, por supuesto, hasta que se hayan cerrado y proclamado. A veces, ni siquiera entonces. Pero al final del lunes puede darse por cierto que los nacionalistas (CC) de Paulino Rivero y los populares (PP) de José Manuel Soria cerrarán esta misma semana, quizá el miércoles con algunos flecos a cerrar antes del sábado, el gobierno de coalición para el archipiélago.

Los dos políticos salieron razonablemente satisfechos de la reunión. En ningún momento se puso en duda que la presidencia corresponde a Paulino Rivero. En cuanto a la vicepresidencia, la confirmación de que corresponderá al PP de Gran Canaria, guarda el equilibrio insular, pero es muy difícil que José Manuel Soria acepte el cargo sin decisivas competencias en el área que profesionalmente domina, que es la economía, donde hasta sus adversarios le reconocen como uno de los mejores, si no el mejor, experto de Canarias.

La economía del archipiélago se acerca a un escenario histórico, a una etapa de oportunidad, y también de riesgo, sin precedentes, y sería absurdo, en este momento, no utilizar los mejores recursos políticos y profesionales para gestionarla. En cualquier caso, de una u otra manera, lo probable es que la semana actual complete el acuerdo para la formación del gobierno CC-PP. Después de las elecciones generales, ya se verá.