Roig, de Mercadona, el más duro

La reunión de empresarios y Gobierno del pasado sábado sorprendió por el tono amable de los directivos, frente al anterior encuentro, donde fueron muchos y claros los reproches. Este fin de semana el tono era distendido, más preocupado en el consejo 'paternal'  a un presidente cansado. Salvo el presidente de Mercadona, Juan Roig, que no abandonó el tono duro e incisivo que caracteriza sus últimas intervenciones sobre la situación económica, para llamar la atención sobre la caída imparable del consumo. El empresario valenciano hizo un extenso análisis sobre la situación del mercado de alimentación u distribución, alertando del imparable aumento de costes, la competencia asiática y el estrangulamiento de la renta de los ciudadanos. Roig recordó al presidente del Ejecutivo que el modelo productivo español se asienta en exportaciones y consumo, y que la recuperación económica no puede sustentarse sólo en las primeras. De hecho, fue de los pocos que se atrevieron a asegurar que en la economía  "lo peor está aún por llegar". “Nuestro boom no ha estado sustentado en la productividad. Por eso nos está costando tanto salir de una crisis, de la que todavía no hemos visto lo peor. De hecho, los único bueno que tiene 2011 es que será mejor que 2012", aseguraba un Roig serio, muy serio. Los empresarios piden a ZP que agote la legislatura Gobierno y empresas pactan 30.000 becas para reforzar la competitividad