Uruguay se prepara para asumir la Presidencia del Mercosur

El canciller se refería así a las llamadas reglas de origen, un mecanismo que determina el porcentaje de elementos locales que un producto necesita para ser considerado como un bien del Mercosur.

Brasil hizo a principios de año una propuesta para que los productos uruguayos y paraguayos pudieran incorporar hasta un 70 por ciento de componentes de países ajenos al Mercosur y que éstos pudieran circular sin tasas adicionales en el interior de la unión.

El ministro se mostró optimista y dijo que más allá de los problemas que atraviesa el bloque, lo importante es que éste "camina" y puso como ejemplo el nuevo planteamiento de Brasil de crear un fondo para constituir una base de inversión conjunta para determinados sectores industriales.

"Es verdad que hay que corregir muchas asimetrías, pero el 27 por ciento de nuestra producción lo exportamos a la región con arancel cero, eso implica 1.200 millones de dólares al año, irse del Mercosur es casi un suicidio", agregó.

Montevideo ha mantenido durante el último año y medio una posición muy crítica con el bloque sudamericano, fundado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay y al que se está adhiriendo Venezuela, por la incapacidad de dar respuestas a sus necesidades nacionales.

Por ello quiere aprovechar la presidencia semestral que asume el próximo viernes para establecer mecanismos que beneficien a los socios menores.

Uno de ellos es la creación de "un programa para la eliminación de las restricciones no arancelarias, además de la armonización de los incentivos para la atracción de inversiones, dos aspectos que no sólo mantienen, sino que acentúan las asimetrías existentes y que favorecen a las economías más grandes", dijo a Efe el director de Integración y Mercosur de la cancillería, Carlos Amorin.

"También queremos que la libre circulación de bienes en la región sea una realidad efectiva y para ello se debe eliminar el doble cobro del arancel externo común (AEC) definitivamente".

"Pero no sólo el adelanto para Paraguay y Uruguay, sino eliminarlo definitivamente", acotó Amorin.

Brasil propuso en enero no aplicar el AEC a los productos originarios de fuera del bloque que ingresen a su territorio a través de Paraguay y Uruguay, pero Argentina vetó la propuesta por entender que iba en contra del espíritu del bloque.

Amorin explicó que durante la presidencia uruguaya también se va a plantear la revitalización de las negociaciones externas y la revisión de los métodos y los enfoques aplicados hasta la fecha, porque a su entender "no han funcionado".
"Hay 24 negociaciones abiertas y sólo hemos terminado una, con India", explicó.

El funcionario uruguayo reiteró que es prioridad absoluta intentar reflotar las negociaciones con la Unión Europea, que se llevan a cabo desde 1999 y que están estancadas desde hace más de dos años a la espera de la resolución de la Ronda de Doha que se lleva a cabo en el marco de la Organización Mundial del Comercio.