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¿Peluquero artista o artista peluquero?

¿Peluquero artista o artista peluquero?

viernes 29 de julio de 2011, 01:36h
En tertulias y otros programas de televisión y radio es bastante frecuente la participación de artistas que hacen de comunicadores, comunicadores que hacen de artistas, cocineros que hacen de escritores, escritores que opinan como psicólogos... Y en algunos ambientes puede que se califique esto como de 'intrusismo'. Pero no generalicemos, no conviene colgar a nadie el sambenito sin conocer bien toda su historia, es decir, sin conocer su preparación, su formación y su vocación. Lluís Llongueras puede parecer a algunos, pocos, a los que no le conocen bien, un caso cercano al intrusismo. "¿Qué hace un peluquero exponiendo en el Arts Santa Mònica bajo un título tan complejo como 'Fractales'?", se dirán algunos. Quienes tuvimos la suerte de escuchar la deliciosa disertación que realizó el prestigioso físico Jorge Wagensberg en el acto de inauguración de dicha exposición lo tuvimos muy claro: "La autosimilitud fractal viene de Dalí, armonía interior y armonía exterior se tocan…". Y pudimos admirar la inteligencia, clarividencia y oficio de Lluís Llongueras. Y hablo no del Llongueras peluquero sino del Llongueras artista. Del joven, nacido en 1936 en la localidad de Esparraguera, que en sus ratos libres no dejaba de dibujar, investigar en el mundo de la fotografía y pintar al aire libre. Esa creatividad la encauzó también hacia la peluquería y -como muy bien ha expresado el president Artur Mas- "Llongueras ha traspassat fronteres com a professional en el món de la perruqueria i l’estilisme i ha portat amb ell la imatge i l’empenta de Catalunya arreu del planeta. Llongueras és un referent com a emprenedor, un polifacètic artista que compagina a la perfecció art i ciencia per a oferir-nos una col·lecció escultòrica amb una màgia i una essència tan enigmática i enlluernadora com la del seu creador. Només li podem donar les gràcies per ser exemple de la nostra Catalunya més creativa i apassionada". Por su parte Jordi Cabré, director general de Promoció i Cooperació Cultural, se refirió a este Llongueras como un "discípulo de Dalí" y "genio transgresor que a partir de la naturaleza, femenina o vegetal, crea escuela". Y en 1979, por encargo de Dalí, el artista peluquero realiza la instalación de la peluca gigante (récord Guiness) en la Sala Mae West del Museo Dalí de Figueres. Poco más tarde tiene lugar su primera exposición de fotografía, a continuación se forma como escultor en La Massana. Y si bien el peluquero artista tiene más de 100 salones, el artista peluquero ha participado en más de 100 exposiciones y ha ganado varios premios: una de sus obras fue adquirida por la baronesa Tita Cervera como obsequio de cumpleaños para su esposo el barón Heini Von Thyssen y forma parte del fondo privado de arte de Villa Favorita, en Lugano (Suiza). En 1989, bajo el título Mi Dalí particular edita un libro de colección, de más de 400 páginas, homenaje al genio y amigo. También publica, en 1991, su primer libro de poesía y fotografía; ha diseñado la Copa Catalunya de Fútbol… trabajador incansable, en una labor de investigación, revoluciona el proceso escultórico consiguiendo bronces fundidos sin necesidad de moldes ni "cera perdida", elaborando sus obras originales con nuevas materias, con las que consigue esculturas imposibles de realizar en barro, yeso o cera. Llongueras abre una nueva vía y convierte esas técnicas en caducas. Y a esto le siguen numerosas exposiciones, nuevos libros de poesía y dibujos y/o fotografías… "Primero hice figurativo, luego abstracto y ahora hago fractales -nos dice el artista-. En todas estas piezas no hay nada que se parezca a la naturaleza ni nada a otras obras de arte. Quizá porque no miro ni observo a otros artistas, me inspiro en la fractalidad de la naturaleza sin copiarla…". El poeta Vicenç Altaió, director de Arts Santa Mònica, manifestó que "tener un artista de la singularidad y creatividad de Llongueras nos honra". Y sin saber cómo, mi mente viajó a los salones Llongueras y los vi llenos de público, atendidos por unos grandes estilistas cuya gestualidad se expresaba como fractales. A mi alrededor, se hallaban las esculturas del artista peluquero, realizadas con un ritmo repetitivo, armónico, inspiradas en los fractales de la naturaleza, de gestualidad subjetiva. Recomiendo la visita.
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