Banco de España reclama al Gobierno y a la UE más ambición y rapidez reformista

A su juicio, esta recuperación está basada en una política monetaria que sigue siendo acomodaticia, en las medidas para restaurar el funcionamiento del sistema financiero y en el impacto de la demanda mundial sobre la renta interior. En cualquier caso, el Banco de España subraya que los riesgos a la baja han aumentado por la elevada incertidumbre no sólo de la desaceleración del comercio internacional, sino también, y la más importante, de las tensiones en los mercados de deuda soberana. En este sentido, destaca que estas tensiones tienen efectos negativos sobre las condiciones de financiación del sector privado y sobre la confianza de los agentes económicos, que puede repercutir en sus decisiones de gasto. El Banco de España recomienda una mayor ambición en las medidas para dar más vigor al crecimiento, entre las que destaca las que ya anunció el Consejo Europeo el pasado 6 de julio. Así, aboga por avanzar en reformar los mecanismos de negociación salarial y de la estructuras impositivas, con la reducción del peso de las figuras con mayor incidencia sobre el empleo. También defiende una mayor adecuación de los sistemas de pensiones a las perspectivas demográficas y que se pongan en funcionamiento los compromisos adquiridos en el Pacto del Euro Plus para mejorar el crecimiento, la competitividad y el empleo. Sobre el Pacto del Euro Plus, el Banco de España resalta que sus políticas de reforma van en la dirección adecuada, si bien pide que se dote de mayor concreción tanto las medidas propuestas como sus recomendaciones. Por otra parte, el supervisor calcula que la inflación en el área del euro se mantendrá por encima del 2 % en los próximos meses y que volverá a tasas inferiores a comienzos de 2012. Reclama más contención salarial El Banco de España considera que la subida salarial pactada en los convenios colectivos hasta junio, del 2,7% frente al 3,1% del primer trimestre de 2011, sigue siendo "elevada" al significar un repunte "sustancial" respecto al 1,5% acordado en promedio en el ejercicio precedente. "La subida salarial no parece acorde con la situación del mercado laboral", enfatiza la entidad emisora en el Boletín Económico correspondiente a los meses de julio y agosto, en alusión a la escalada de la tasa de desempleo por encima del 20% de la población activa. El Banco de España achaca al "estrecho vínculo" que aún existe entre la negociación colectiva y la inflación el nuevo repunte de los costes laborales. Para el segundo trimestre, la entidad estima una subida salarial pactada del 2%, lo que ve "compatible" con la tendencia a la baja tras el primer trimestre de este año. Aún así, espera que la reforma de los convenios aprobada por el Gobierno el pasado 10 de julio rebaje este incremento de la remuneración de los trabajadores, al compás de la desaceleración de la inflación. "Cabe esperar que la desaceleración (de los costes laborales) continúe en lo que resta de año a medida que vaya avanzando la negociación colectiva", aventura la institución en el Boletín Económico. En este sentido, la entidad gobernada por Miguel Ángel Fernández Ordóñez aclara que "casi todos" los convenios registrados entre enero y junio corresponden a revisiones de acuerdos plurianuales firmados en ejercicios anteriores, según el IPC de diciembre de 2010. Para los convenios de nueva firma en este año, cree que se muestra un aumento de la tarifa "más modesto", del 1,4 %. CAMBIOS "SIGNIFICATIVOS" POR REFORMA DE CONVENIOS Para el Banco de España, la reforma de la negociación colectiva, de la que valora su potenciación del convenio de empresa y del descuelgue salarial, abre la puerta a "cambios significativos". Ahora bien, recuerda que la materialización de los cambios dependerá de los sindicatos y los empresarios. Con el fin de "mitigar" la incertidumbre sobre su aplicación por parte de los agentes sociales, recomienda "profundizar" en los aspectos más positivos durante su tramitación en el Congreso. Aún así, critica que pese a la "relevancia" de la reforma, ésta no incorpora "ninguna novedad" en materia de indiciación salarial, como podría ser la productividad. Lea también: La economía crece un magro 0,3% hasta junio y dificulta el objetivo del Gobierno