El rincón de Gumer: Un verano pelotudo

Días de sol y pesca. La otra noche me encontré cenando en Santa Uxìa de Ribeira a la escuadra roja de Valladolid. Quijano, el bueno, en bermudas, acompañado del ex alcalde-embajador (o casi), del nuevo rector de la Universidad y de un prestigioso doctor que cuida la salud dental de un buen puñado de pucelanos. Pensé que los pillaría “in fraganti”, poniéndose morados a marisco. Pero nada de eso: mejillocintos y caldeirada de pescado. Lo sustancioso estaba en la conversación, pero solo alcancé a oír que si los ayuntamientos no tenían un duro, la “Uni”, otro tanto. La estrella fue el señor Bolaños y su aventura “evangelizadora”, en materia municipal, por Costa Rica, El Salvador y otros.    La semana pasada les comenté la jornada de pesca de Rajoy. Completo la jugada: las no muy buenas compañías del aspirante a presidente. Resulta que algún avispado ricachón de la zona, empresario conservero por más señas, le envía su yate y luego se apresura a llamar a los medios de comunicación para ofrecerles su interesada versión, porque don Mariano pesca desde una sencilla gamela y, según ha declarado en la intimidad, así seguirá haciéndolo si las urnas le dan su O.K. A Don Mariano le sobran los moscones cojoneros. Él es feliz en su cáscara de nuez.    Y una nota para mis lectores-mensajeros. Estoy de vacaciones y la política la dejo para otra ocasión. Del jefe ni les hablo. Va a su bola y la otra tarde le escuché que el mejor deporte veraniego era tocarse las pelotas. Pero el caso es que nunca le he visto ni jugar al fútbol, ni al baloncesto, ni al tenis, ni al golf….Será que se ha vuelto loco. Gumer. El hurón.