Colombiano fugado de Uribana iba a ser deportado

El hombre de 47 años de edad cumplía una sentencia de 4 años y seis meses en Venezuela por el delito de presentar documento público falso, pues el 16 de mayo de 2008 fue detenido por una comisión y presentó una cédula falsa a nombre de Jhoan Esteban Astudillo Mirabal. Fue enviado a Uribana y en abril de  2009 fue sentenciado por el Tribunal Sexto de Juicio del estado Lara. Hasta esa fecha el colombiano ya había pagado en Uribana dos años y 11 días, faltándole por pagar dos años cinco meses y 19 días, tras estudiar el caso y por su labor como ranchero le otorgaron una nueva medida de rendición de pena de dos años 12 días, lo que lo conllevó a casi terminar su pena en la actualidad. Los tribunales emitieron la extinción de pena criminal pero en vista de que en marzo del presente año se acordó que Galvis Quintero de (47) debía ser deportado porque estaba siendo solicitado por las autoridades colombianas, se acordó que terminara de pagar los 5 meses restantes que concluían precisamente este mes. Galavís acudió varias veces a la Corte de Apelaciones alegando que no podía salir del país porque tenía esposa y tres hijos en el país en donde vivía supuestamente desde hacía 20 años, específicamente en la población de Quíbor en el municipio Jiménez, del estado Lara. Tras el rechazo de la Corte y tal vez el miedo a lo que le esperaba en su país de origen, decidió fugarse, ya que según los expedientes 1999-000323 que reposan en los archivos del DAS tenía acusaciones por los delitos de homicidio agravado, secuestro extorsivo y rebelión. Las autoridades de seguridad han activado la alarma de seguridad en todo el país a fin de dar con el paradero de este sujeto considerado de alta peligrosidad debido a sus antecedentes a los que se le suma la fuga de un penal.