Vicepresidenta de España firma acuerdo de ayuda a Nicaragua

En Managua, la capital de Nicaragua, el jefe del Estado, Daniel Ortega, y la vicepresidenta del Gobierno español, presidieron la firma de un acuerdo por el que se fijan las prioridades de la cooperación española en el país centroamericano.

Este es el séptimo acuerdo de estas características entre ambos países y establece las prioridades para los próximos cuatro años en la lucha contra la pobreza y en favor del desarrollo económico y social.

Según el acuerdo, la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) dirigirá sus actuaciones a mejorar la gobernabilidad (colaborando, por ejemplo, en la mejora en el acceso a la justicia de las mujeres en materia de familia) y a cubrir las necesidades sociales básicas (con programas de seguridad alimentaria, mejora educativa y lucha contra el SIDA y la malaria).

Nicaragua depende en gran medida de la cooperación internacional, que supone un 30 por ciento de su Producto Interior Bruto. Es el país latinoamericano que recibe más ayuda por habitante, y España ha ido aumentando su cooperación de tal forma que en 2006 ascendió a 45 millones de euros. Para el 2007 se prevé que aumente hasta los 58 millones.

En la actualidad, el 45 por ciento de la población de Nicaragua vive en situación de pobreza y un 15 por ciento de pobreza extrema, sobreviviendo con menos de un dólar diario.

Durante la permanencia en Managua de la vicepresidenta, el Gobierno y la empresa española Unión Fenosa lograron un acuerdo en el contencioso sobre la distribución de energía eléctrica. La etapa del viaje de De la Vega a Nicaragua sirvió para respaldar ese acuerdo y sellar las bases de la cooperación española con este país.

Unión Fenosa, dueña de las distribuidoras Dissnorte y Dissur en Nicaragua, distribuye la energía eléctrica desde el año 2000, y se queja de los numerosos impagos por la prestación de su servicio.

Por su parte, el Gobierno de Nicaragua considera que Unión Fenosa no ha hecho las inversiones necesarias y eso repercute en los problemas de distribución eléctrica, que provocan apagones de hasta siete horas en Managua.

Ortega, quien desligó la visita de la vicepresidenta con este contencioso, explicó el origen del problema, que dijo que parte de la privatización de la distribución de la energía eléctrica durante gobiernos anteriores. "Sacan y sacan y no invierten nada en mantenimiento", insistió Ortega.

Tras lamentar la existencia de una "tiranía del capitalismo global", el Presidente Ortega destacó la lucha de Nicaragua y de otros países como Cuba, Bolivia y Venezuela para conseguir un comercio justo y para hacer frente a la "avaricia sin límites de un modelo económico que busca el enriquecimiento a corto plazo a costa de lo que sea y aunque eso suponga la destrucción del medio ambiente".

El mandatario elogió el hecho de que la delegación española estuviera encabezada por tres mujeres, la vicepresidenta y las secretarias de Estado Leire Pajín y Trinidad Jiménez, y se dirigió a esas tres "hermanas y compañeras" para asegurar que son un ejemplo y destacar los avances que las mujeres han protagonizado en un país con "historia de machismo", como es España.

Al culminar su visita a Nicaragua, la vicepresidente de España se trasladará a Chile y posteriormente a Ecuador, donde encabezará junto con la Presidenta chilena, Michelle Bachelet y el Presidente Rafael Correa, la X Conferencia Regional de la Mujer en América Latina y el Caribe.