Controlados dos incendios en la Sierra Norte

Dos dotaciones del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid continuaban trabajando a primera hora de la mañana del domingo en la extinción del incendio que se declaró este sábado por la tarde en El Berrueco, y que obligó a desalojar un camping, después de que el fuego fuera controlado en torno a las dos de la madrugada, según informó un portavoz de Emergencias 112.
 
Las llamas comenzaron a propagarse desde una zona de arizónicas sobre las 18.00 horas de ayer, sábado, y han afectado a pasto, matorral, monte bajo y encinas. Hasta el lugar del suceso se desplazaron hasta 32 dotaciones de los bomberos de la Comunidad de Madrid y de Medio Natural y tres hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente, que, sin embargo, no pudieron actuar ante la poca visibilidad de la zona. El fuego obligó a activar el nivel 1 del Plan de Protección Civil de Emergencia por Incendios Forestales en la Comunidad de Madrid (INFOMA).

En torno a la medianoche, 20 dotaciones de bomberos y de efectivos de Medio Natural continuaban trabajando en las tareas de extinción del incendio y, al tenerlo prácticamente controlado, se desactivó el nivel 1 del INFOMA. Previamente, todos los usuarios del Camping del El Berrueco pudieron regresar a sus alojamientos.

Por otro lado, quince dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid emplearon una hora en controlar un incendio forestal que se declaró hacia las 18.00 horas de hoy en una zona próxima a Garganta de los Montes, municipio enclavado en el Valle del Lozoya y distante unos 80 kilómetros de la capital.

Según informó un portavoz de Emergencias 112, en el control del fuego participaron medios aéreos y terrestres de los Bomberos de la región, cuya labor se vio favorecida por las suaves temperaturas y la lluvia caída a lo largo del domingo.

Entretanto, dos dotaciones de Bomberos de la Comunidad y dos retenes de la Dirección General del Medio Natural mantenían labores de vigilancia en el término municipal de El Berrueco. Al caer la tarde del domingo se desconocía la extensión de la superficie quemada en este municipio.

"Una ratonera"
Los vecinos de la urbanización 'Pradera del amor' de El Berrueco, de más de 200 viviendas, donde presumiblemente se generó el incendio, aseguraron que "si el viento hubiera cambiado de dirección podía haber sido una ratonera" por lo inaccesible del lugar, la vegetación y la falta de agua corriente, ya que solo disponían del agua de unos pozos.

Actualmente la urbanización tan solo cuenta con el agua de los pozos que, en verano, según los vecinos, se encuentra al 10 por ciento de su capacidad, por lo que, tal y como relató Cesar Piorno, la urbanización se convirtió en "una ratonera". Así, se lamentó de que la urbanización "todavía no esté terminada, ya que las calles son estrechas y hay algunos sitios que son puros caminos en los que cabe solo un coche". "Los camiones de bomberos y a veces otro tipo de camiones no pueden entrar porque no pueden doblar por las esquinas", aclaró.

El vecino se mostró agradecido porque "empezó a correr el viento hacia una zona que no estaba construida", por lo que el fuego no afectó a las casas de la urbanización, aunque sí a parte de la vegetación de las parcelas. "Pasamos mucha angustia porque es un terreno muy escarpado, con muchísima vegetación, parcelas sin cuidar, hay arizónicas, enebros y pinos que prenden como la pólvora", añadió.

Además, se mostró esperanzado de que no hubiera sido algún vecino el que provocara el incendio al decir que "la gente es bastante consciente como para que sea una barbacoa", aunque no descartó que fuera "una colilla de algún coche que pasara".

Susto en el camping
Los más de 200 usuarios de el Camping El Berrueco también se mantuvieron alerta por las consecuencias del fuego por la prevención de la Guardia Civil. De hecho, el gerente de CB Acuanor, empresa que gestiona el camping, José Luis Conejo, destacó que "si el viento cambiaba, en 15 o 20 minutos el fuego podía estar" en el camping, por lo que, aunque no se llegó "a alarma total, se empezaron con las precauciones por si el fuego llegaba al camping".

De hecho, la gerente del bar del camping, Mari Carmen, aseguró que el fuego llegó a estar a un kilómetro, por lo que "la gente se alarmó, los niños lloraban y la gente cogió los coches porque el director avisó para desalojarlo". "Hubo gente que hasta se fue a su casa porque las entró un miedo que no podía dormir ni siquiera por la noche", añadió. Los servicios de investigación de la Guardia Civil continuaban investigando las causas del fuego durante la mañana del domingo.