Solo una veintena de empresas españolas tienen presencia en Japón

“Japón puede servir de base y trampolín para el resto de Asia”, sostiene Juan Luis González Andersson, director comercial para Asia-Pacífico de la firma de joyería Carrera y Carrera. Este directivo participó en la jornada 'Oportunidades de negocio en Japón', organizado por la Cámara de Comercio de Madrid, el Instituto de Comercio Exterior (ICEX), la sociedad autonómica Promomadrid y la patronal de empresarios madrileños (CEIM).

Esta jornada tuvo lugar después de que los cuerpos diplomáticos de España y Japón se intercambiaran una serie de invitaciones al máximo nivel con el fin de impulsar sus relaciones bilaterales, fruto de la visita a Madrid que el pasado 1 de junio realizó el ministro japonés de Exteriores, Taro Aso. El Gobierno de Rodríguez Zapatero prevé conseguir con ello una mayor penetración económica en el mercado asiático, mientras que el que preside Shinzo Abe pretende atraer más inversión directa a su país.

Hasta la fecha, sólo una veintena de empresas españolas tienen presencia en Japón sobre un total de 4.276 compañías extranjeras establecidas en este mercado. El consejero económico y comercial de España en Japón, Alfonso Carbajo Isla, señaló que la inversión española directa conjunta asciende a 47,81 millones euros. Las empresas españolas que han desembarcado en Japón proceden, en general, de los sectores de actividad tradicionalmente más activos en comercio exterior: moda, alimentación y bienes de consumo. Entre ellas Zara, Adolfo Domínguez, el Grupo Lladró (que adquirió Carrera y Carrera el año pasado), las bodegas Torres y Freixenet, Chupa Chups (esta marca ha pasado a ser propiedad de la italiana Perfetti Van Melle) y Polyester Málaga.

En cambio, 160 compañías japonesas se han asentado en España y, de éstas, 65 cuentan con centros de producción. Fundamentalmente, se dedican a los sectores de transporte, química y electrónica. Entre ellas, destacan Sony, Sanyo, Sharp, Hitachi, Canon, Ube Industries, Fujitsu, Nipón Denso, Asahi Glass y las automovilísticas Nissan, Yamaha y Honda. La inversión japonesa ha creado 25.000 empleos directos.

Japón es actualmente la tercera potencia económica a nivel mundial, tras Estados Unidos y la Unión Europea. La cooperación entre el gobierno y las industrias, la costumbre japonesa del trabajo duro y el dominio de la tecnología han llevado a Japón al éxito económico del que disfruta hoy en menos de medio siglo. A esto hay que sumar que Japón cuenta con un mercado de 127 millones de habitantes, con una capacidad adquisitiva elevada y una distribución muy equitativa de la renta.

Alfonso Carbajo subrayó que en Japón hay “grandes posibilidades de inversión en sectores más tecnológicos, fundamentalmente los que se refieren a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), la biotecnología y las relacionadas con las energías renovables y el medio ambiente”. González Andersson destacó que la economía japonesa representa casi la tercera parte de la economía asiática, aunque, puntualizó, "no se debe cometer el error de pensar que Japón es como el resto de Asia, ni que el resto de Asia es como Japón".