Unas 70 personas han tenido que ser desalojadas de sus viviendas la madrugada del domingo después de que se iniciara un aparatoso incendio en un edificio de tres plantas y cubierta de madera, situado en el número 8 de la calle de la Huerta del Bayo, en el distrito de Centro. Algunos de los vecinos creen que el siniestro fue provocado.
Un portavoz de Samur-Protección Civil refirió que no se han producido heridos debido al fuego, cuyas causas todavía no han podido ser determinadas. El suceso ocurrió alrededor de las 3.30 horas de la madrugada del domingo, cuando se inició el fuego en la tercera planta del edificio, propagándose con rapidez por la cubierta de madera, que cayó sobre las nueve viviendas de dicha planta destruyéndolas completamente.
Los 38 vecinos del edificio fueron desalojados, así como los de las viviendas adyacentes al edificio siniestrado, aunque estos han podido regresar a sus casas. Bomberos del Ayuntamiento de Madrid controlaron el incendio sobre las 4.00 horas y evitaron que el fuego se propagara al edificio colindante y aún permanecen en el lugar asegurando las estructuras. Cinco personas que se encontraban en tres de las nueve viviendas que quedaron destruidas han sido realojados por el Samur Social, mientras que el resto de vecinos espera a que los bomberos concluyan sus trabajos para volver a sus casas.
"Querían hacer daño"
Algunos de los vecinos desalojados aseguraron que el siniestro fue provocado. "Querían hacer daño y lo han hecho", afirmó la propietaria del 2º C, Jacinta Cobos. Esta vecina relató que el pasado viernes, día 17, dos hombres subieron a la tercera planta, donde supuestamente se inició el incendio, y "rompieron la puerta de un piso" abandonado. Según las sospechas de algunos vecinos, esos mismos individuos volvieron el sábado y "prendieron fuego" al apartamento.
"Creemos que es intencionado", afirmó otra vecina del inmueble, quien recordó que, cerca del edificio, ya se han producido "otros dos intentos de incendio"; uno, en un carpintería aledaña y otro, en un cubo de basura en el portal del edificio. El portero del edificio, Mohamed, que se encargó de avisar a los vecinos en cuanto vio el fuego para que desalojaran sus viviendas, se quejó de que tienen que convivir con "los muchos drogadictos" que acostumbran a refugiarse en el edificio y los señaló a ellos como presuntos responsables.
"Hemos pasado un rato malísimo", recordó Jacinta, quien se encontraba durmiendo en su casa cuando sintió los gritos de sus vecinos avisándola de que abandonara la vivienda. "Salí corriendo con mis perros y uno se me ha escapado. Ha sido un susto grandísimo", dijo. "Nos despertamos con mucha humareda, y, luego nos asomamos y vimos unas llamas grandísimas, exageradas", comentó Manolo, otro de los vecinos desalojados. Para este vecino, la actuación de los bomberos, que dieron el fuego por controlado en torno a las 4.00 horas, fue "impecable". "En muy poco tiempo lo apagaron todo", aseguró.
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