La Liga sigue (casi) igual

Ya lo cantaba Julio Iglesias, exportero del Real Madrid, no olviden: La vida (futbolera, añadimos) sigue (casi) igual. O sea, la Liga se ha iniciado en 2007/8 con situaciones similares a la anterior, sobre todo en lo que respecta a los equipos que aspiran o deben aspirar al título. A saber, con el Real Madrid sin juego brillante pero con pegada y anotándose los puntos; con el Barcelona fracasando en sus desplazamientos, lo que le costó el campeonato anterior; con el Sevilla bordando el fútbol y goleando, y con el Valencia pegando los habituales petardos en la tierra de la traca.

Y si incluimos a otros equipos de la zona alta de la tabla, o que deberían estarlo por presupuesto, pues tampoco hay muchos cambios respecto a la campaña anterior. El Atlético volvió a desaprovechar una oportunidad de meterse arriba y volvió a caer en el Santiago Bernabéu; el Villarreal arrolador del final de la tempotada precedente también lo es de ésta en su principio, y el Zaragoza pega algún pinchazo sonoro cuando parece que lo tiene fácil para subirse de verdad al carro.

Claro que, como contrapartida es justo y necesario, es nuestro deber señalar, que este pinchazo de los mañicos fue ante uno de los ascendidos, el Murcia, que fue el primero en dar... la sorpresa el sábado, que este domingo continuaron sus dos compañeros que dejaron el pozo de la Segunda. Y apuntando fuerte y aún más alto: ahí es nada que el Valladolid, le gane al subcampeón de la UEFA, el Espanyol, a domicilio. Pero aún es más noticioso que el Almería golee al otrora grande Depor en Riazor.

Por tanto, y sin querer sacar conclusiones decisivas de cara a una competición que no ha hecho más que empezar, sí es mencionable que las fuerzas se igualan en el campo, aunque en los despachos varios equipos hayan tirado la casa por la ventana y se hayan gastado lo que no tienen. Mejor para el fútbol y sus aficionados en general y mejor para la Liga en particular. La emoción está servida, así desde la primera jornada. Que continúe.