El básquet logró la clasificación a los Juegos Olímpicos

Era mucho más que un clásico, con un antecedente casi inmediato donde Argentina con la camiseta le había ganado a Brasil. Pero este juego, era el juego, y a pesar de que muchos “panqueques” ya daban como un hecho la victoria, había que tener cuidado con el potencial de Brasil, que llegaba entero al encuentro crucial.

Y como se esperaba fue una verdadera final, con todos los condimentos que uno puede esperar para un partido que definía nada más y nada menos que la clasificación a los juegos.

El entrenador Hernández dispuso el mismo quinteto que venía entrando en los últimos partidos: Prigioni en la base, Delfino de ayuda, Sandes como alero, y Scola y González bajo el tablero.

El inicio no fue bueno, con un Brasil que acertaba todo y controlaba bien a Scola, mientras se veía a un Delfino impreciso y a Prigioni que trataba de solucionar la buena defensa brasileña.
Los cambios no tardaron en llegar, pero esta vez tampoco fueron solución. Ni el tirador Paolo Quinteros, ni Leo Gutiérrez se encontraban “finos” y Porta le dio descanso a Prigioni en la base.
Brasil se escapaba, pero a puro corazón, y con un Scola que ya se iba perfilando como la llave para ganar el match, Argentina demostraba que estaba viva. Esta remontada le permitió al equipo pasar arriba por un tanto 34-33, lo que llevó al técnico brasilero a pedir tiempo, a dos minutos para la finalización del segundo  cuarto, algo que le dio resultado, ya que pasó a marcar en zona desconcertando a los argentinos, y con un parcial impensado terminaron yéndose al descanso ocho tantos arriba.

Era barajar y dar de nuevo. Veinte minutos quedaban para dar vuelta la historia, ante un Brasil “agrandado” y con la “sombra” de los ausentes que eligieron descansar para prepararse para sus torneos en sus equipos, como Ginobili, Oberto, Hermann, Wolkowysky, más la baja de Nocioni lesionado, lo que parecía mucho para este grupo de “hombres” que dejaron todo para representar al país.

Y como buenos jugadores, pero como más “hombres” que son, borraron prácticamente de la cancha a Brasil en la segunda mitad (el tercer cuarto finalizó 30-13 para los albicelestes). Un Scola imparable-terminó con 27 puntos- , bajó 9 rebotes, dio tres asistencias y fue el gran espejo en que se reflejaron sus compañeros para dar todo de sí. Su compañero en el Tau Pablo Prigioni, también fue clave con 14 tantos, Delfino demostró porque hace dos años que está en la NBA, más el aporte defensivo de Federico Kammerichs que logró tres tapas, fueron mucho para un Brasil, que no se olvidará jamás la lección de básquet que le dio Argentina.

El 91 a 80 lo dice todo. Definitivamente Argentina es una potencia en básquet, en Beijing deberá defender el ORO logrado en los últimos juegos, y si a eso le sumamos las actuaciones en los últimos mundiales (segundo y cuarto) más el hecho de conseguir el pasaporte a los próximos juegos con un equipo al que muchos denominaban “B” engrandecen aún más a estos jugadores.

Ya habrá tiempo de analizar quienes serán los doce que representen a la selección en Beijing, este es el tiempo de ellos, para disfrutar, para gozar, porque se lo ganaron y nadie se los podrá sacar.

Por eso felicitaciones a Scola, Delfino, Prigioni, Gutiérrez, Quinteros, González, Porta, Kammerichs, Sandes,Lo Grippo, Leiva y Gutiérrez, más el cuerpo técnico encabezado por el Oveja Hernández, que con un amor propio envidiable, demostraron lo que es querer una camiseta.

Síntesis
91 - Argentina (17_18_30_26): Prigioni (14), Delfino (13), Sandes (6), Scola (27), González (9) -cinco inicial-, Lo Grippo (2), Porta (3), L. Gutiérrez (2), Quinteros (10) y Kammerichs (5).

80 - Brasil (22_21_13_24): Machado (8), Barbosa (16), Silva (6), Splitter (15), Hilario (2) cinco inicial-, Da Rosa (7), Huertas (2), García (16), Batista (-) y Giovannoni (8).