El presidente del Congreso ha insistido en que, desde su punto de vista, sería mejor que Marín siguiera la tradición y se hiciera un retrato que no rompiera el carácter de pinacoteca de la colección parlamentaria.
Así lo ha comentado Bono en una conversación informal con periodistas en el Congreso en la que ha explicado que aún no ha hablado de este tema con Marín, aunque tiene previsto hacerlo "un día de estos".
Bono ha reiterado que no quiere minusvalorar el arte fotográfico, pero ha aprovechado para revelar que el precio de la foto que Marín planea que le haga la reputada fotógrafa Cristina García Rodero -Premio Nacional de Fotografía en 1996 y primera española que ingresó en la Agencia Magnum- asciende a 10.000 euros. "No es de fotomatón", ha admitido.
Además, ha explicado que si su predecesor le hubiera planteado este asunto al principio de la legislatura, la Mesa del Congreso actual habría tenido tiempo de resolverlo, pero ha dejado claro que si no hay un acuerdo antes de la Constitución de las nuevas Cortes será la próxima Mesa la que deba tomar una decisión.
Si (
No(
