Pemex no buscará cambios en la política de dividendos de Repsol

Pemex, un monopolio estatal, y la constructora española Sacyr-Vallehermoso , principal accionista de Repsol-YPF con el 20% de los títulos, anunciaron a finales de agosto un acuerdo para sindicar sus acciones y votar conjuntamente en la petrolera española. "Lo que estamos buscando es que le vaya bien a la empresa", dijo Suárez Coppel en una reunión con periodistas de medios extranjeros. "De ninguna manera estaríamos beneficiando pagar dividendos si eso implicara no hacer inversiones rentables".

Junto con el pacto, se anunció que Pemex adquiriría un 4,62% más de títulos de Repsol-YPF, lo que sumado al 5% que ya tenía elevaría su participación accionaria al 9,62%. A algunos inversores de Repsol les preocupa que Sacyr busque impulsar el pago de un mayor dividendo para ayudar a estabilizar sus finanzas.

Sacyr tiene que convencer a sus acreedores de que refinancien el crédito pendiente de casi 5.000 millones de euros que vence el próximo 21 de diciembre y que está garantizado con las acciones en Repsol. En caso de que Sacyr no logre refinanciar el crédito y su participación en Repsol se vea afectada, el acuerdo con Pemex desaparecería.

Suárez Coppel explicó que el acuerdo entre las dos empresas establece que si alguna de ellas reduce en un 50% su paquete de títulos en Repsol, el acuerdo se termina. El directivo dijo que Pemex no están buscando otro acuerdo con otro socio de Repsol en caso de que el acuerdo con Sacyr desaparezca, pero tampoco lo descartó.

"No estamos viendo si ellos duran o no duran para ver con quién busco otro", dijo Suárez Coppel. "Ni estamos cerrados ni estamos buscándolo. Son hipotéticos, ya veremos en su momento", añadió.

CAMBIOS EN REPSOL

Pemex ha dicho que lo que le interesa es tener acceso a la tecnología de la española para sus proyectos en México, el séptimo mayor productor mundial de petróleo, pero también impulsar cambios en Repsol que la hagan una empresa más rentable y mejorar el gobierno corporativo.

Suárez Coppel dijo que Pemex está buscando consenso entre los accionistas para promover cambios en la estrategia de dirección de la firma que impulsen su crecimiento. "A Pemex, como accionista, nos gustaría tener más peso en las decisiones, más voz en el consejo", señaló.

"Antes del veintitantos de diciembre que venza el financiamiento (de Sacyr), nosotros estamos en diálogo con todos los accionistas y sentimos que no hay nada de la visión común que pudiéramos tener Sacyr y nosotros que sea opuesto a las necesidades de los demás", dijo el directivo.

Pemex, un importante proveedor de crudo a Estados Unidos, ha sido cuestionada en México por no haber informado a su consejo de administración sobre su aumento de participación en Repsol y el acuerdo con Sacyr.

Suárez Coppel se reunirá con legisladores a mediados de mes como parte de las comparecencias de funcionarios tras el informe del Gobierno del presidente Felipe Calderón, pero se espera que reciba críticas de diputados sobre la operación, tras ser cancelada una comparecencia esta semana al respecto. El directivo dijo que tanto Pemex como Repsol pueden tener una relación complementaria.

"Tenemos una petrolera en España que tiene capacidad de gestión, que tiene flexibilidad, que tiene experiencia en ciertos rubros y tenemos otra petrolera que tenemos mucho petróleo y nos gustaría tener una mayor capacidad de ejecución para explotar ese recurso", dijo.

"Este es un matrimonio hecho en el cielo. Se nos hace ridículo que después de 30 años no podamos haber puesto el foco las dos empresas en lograr estos resultados", subrayó.