Gravísima cornada en la cara a Juan José Padilla de consecuencias imprevisibles

"No veo, no veo". Eran las palabras que pronunciaba desmadejado pero consciente el matador de toros Juan José Padilla al entrar en la enfermería de la plaza de la Misericordia, de Zaragoza, tras ser cogido espectacular y dramáticamente por su segundo enemigo, de la ganadería de Ana Romero, cuando le banderilleaba. Según el parte médico emitido en la propia enfermería, desde donde se le ha trasladado a un hospital para ser evaluado y operado de los múltiples destrozos del pitón, que le entró por el pómulo izquierdo y le salió por el ojo, el jerezano presenta "grave traumatismo cráneo facial" y su pronóstico es "muy grave".

El torero sufre "grave traumatismo cráneo facial por lesión en el aparato auditivo y el ojo izquierdo. Se le aplica sedación profunda y entubado para respiración traqueal y es trasladado al (hospital) Miguel Servet", dice este parte firmado por el doctor Carlos Val-Carreres, cirujano jefe de la plaza de toros, según informa Efe..En breves declaraciones a los periodistas tras facilitar el parte, el doctor ha agregado que el pitón del toro "ha entrado por encima del maxilar inferior del lado izquierdo".

"Es una herida muy escandalosa en todos los sentidos", ha dicho Val-Carreres, quien ha añadido que "todo está pendiente de la exploración del hospital" "Se va a poner en manos de muchos especialistas: oculistas, otorrinos, maxilofaciales y cirujanos plásticos", ha explicado. El médico ha informado de que el torero ha entrado en la enfermería de la plaza "consciente y con sensación de asfixia y por eso lo han intubado traquealmente".

Un toro peligroso

Padilla ha sido ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Miguel Servet y está a la espera de ser intervenido quirúrgicamente, han precisado a Efe fuentes del Gobierno de Aragón. En este centro hospitalario está ya preparado el dispositivo que se destina a este tipo de incidencias, controlado por un especialista maxilofacial, según las citadas fuentes.

El torero ha resultado herido por el cuarto toro de la tarde, un animal peligroso y complicado de la ganadería de Ana Romero, que le ha corneado en el pómulo izquierdo a la salida de un par de banderillas. Al ser recogido por las asistencias, Padilla se quejaba diciendo "no veo, no veo", según algunos espectadores.