El ex presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE),
Teddy Bautista, se marchó en julio muy 'digno' de su puesto en la entidad diciendo que lo hacía por decisión propia, a pesar de que las circunstancias policiales le habían dejado entre la espada y la pared. Y se fue con la cabeza alta, pese a pasar 2 días en el calabozo, y con una buena suma en el bolsillo: 2 millones de euros del fondo de pensiones de la SGAE. Sin embargo, ahora no le parece suficiente...
Bautista ha decidido presentar una demanda laboral a la SGAE para exigir el pago de una 'módica' indemnización por despido improcedente, nada menos que 800.000 euros... El exjefe de la SGAE obvia no sólo que su decisión de abandonar el cargo, supuestamente, no fue un despido sino una baja voluntaria, sino algo mucho más grave, que aún no hay una resolución judicial en firme que le exculpe de los cargos de los que está acusado en el 'caso Saga' (apropiación indebida, administración fraudulenta y delito societario), unos delitos que podrían suponer una más que justificada causa de despido si llegara a probarse su autoría, ¿o no?
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