Se acerca el 'debatazo' del día 7: así fueron los dos 'cara a cara' de Rajoy y Zapatero de 2008

En ambos casos, los dos candidatos llegaron sonrientes y posaron para los periodistas antes de sentarse en el plató. Todo había sido pactado previamente, desde la forma de la mesa hasta los colores de ésta y de los decorados. Incluso se había pactado el número de primeros planos que se haría a cada uno. Un reloj situado en el escenario marcaba el tiempo de intervención de cada candidato, que tenían 3 minutos cada uno de intervención inicial más otros 2 de réplicas. Luego cada bloque lo cerraban con un minuto para desgranar los temas, también previamente estructurados en bloques. El moderador/a les daba paso o les cortaba si veía que se enzarzaban en la discusión o se pasaban en el uso de la palabra. En ese sentido, Campo Vidal lo tuvo más fácil que Olga Viza.


El primer debate más sosegado que el segundo

Dentro de que en los dos cara a cara se vivieron momentos duros y de tensión, el primer debate fue más sosegado que el que celebrarían días después ambos candidatos. Tanto es así que al finalizar el primer 'duelo', Campo Vidal ha confesado que lo que más le sorprendió fue ver cómo Rajoy y Zapatero salían hablando de manera cordial sobre León, en donde ambos coincidieron estudiando.

El primer debate tuvo una audiencia de 13 millones de telespectadores casi dos millones más que el segundo, y pasó a la historia como 'el de la niña de Rajoy', personaje que inventó el líder de la Oposición  como ejemplo del futuro que a  él  y a su partido les gustaría construir, con mayores oportunidades para los jóvenes. "Una niña que nace en España y que tenga vivienda y padres con trabajo. Que se pueda pasear por todo el mundo porque sepa idiomas, que no tenga miedo a los demás y que sienta orgullo de ser española". Esta frase fue la más criticada por sus adversarios políticos que se estuvieron 'mofando' de 'la niña de Rajoy' durante mucho tiempo. 


El descontrol de la inmigración

La inmigración, que fue uno de los grandes problemas con los que se enfrentó el Gobierno socialista en su primer mandato con una política permisiva que generó el 'efecto llamada',  fue uno de asuntos centrales  del debate. Rajoy no tuvo concesiones y afirmó que "hay que poner orden y control en el fenómeno migratorio. Somos el segundo país del mundo a la hora de entrar ciudadanos extranjeros y no está controlado. Es una avalancha y usted no ha hecho más que complicar las cosas provocando un efecto llamada", le dijo Rajoy. Zapatero tardó en entrar a contestar pero finalmente le espetó: "usted ha sido ministro de Interior y se les colaron un millón de sin papeles porque no controlaron las fronteras. Hicieron cinco regularizaciones. Nosotros la hicimos con un contrato de trabajo, con los empresarios y los sindicatos, y ustedes con un bonobús", le replicó mostrando un documento que acreditaba lo dicho y hecho por el gobierno de Aznar.

Zapatero prefirió presumir de los logros alcanzados en políticas sociales, distanciándose en ese terreno con el partido conservador. Así, sacó a relucir la educación, con el aumento de becas concedidas;  la ley de  igualdad, las ayuda a las familias o las dirigidas a los jóvenes, recordar al líder del PP que su anterior Gobierno "no dedicó ni un euro a los jóvenes para el alquiler de vivienda", asuntos que Rajoy le había reprochado anteriormente.


La negociación con ETA sale a relucir

Pero el plato fuerte llegó cuando les tocó hablar de política exterior y de terrorismo. Rajoy, que quiso utilizar este asunto para minar a su oponente, acusó al presidente de cometer "una frivolidad" al intentar una "negociación política" con una banda terrorista, "algo que no hizo nadie en España". Zapatero, por su parte, le reprochó que el PP era "el único partido del mundo que se ha manifestado contra un Gobierno por la lucha contra el terrorismo", mientras le recordaba que cuando él  estuvo en la oposición dio su apoyo sin condiciones a Aznar en la lucha contra ETA, cuyo Pacto además, fue impulsado por el PSOE.

Pero Rajoy no cejó y siguió atacándole: "ETA está en los Ayuntamientos con nuestro dinero, vuelve a la violencia callejera, vuelven a matar, ha roto un acuerdo nacional. Usted ha mentido sobre ETA", le espetó. Zapatero, dolido, le respondió insistiendo en que "a usted nunca le ha salido apoyarme, en ningún momento. Y la prueba es que en cuanto ganamos las elecciones tuvimos que ir a una comisión de investigación", dijo en alusión a los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid.


El Estatut y "España se rompe"

Pero hubo otros muchos temas que provocaron un duro enfrentamiento entre ambos. Uno de ellos el Estatut de Cataluña, con el "España se rompe" tan utilizado en la legislatura por la oposición del PP. Rajoy no tuvo empacho en acusar a Zapatero de "sembrar la discordia y el enfrentamiento entre Comunidades con las reformas de los estatutos", acusación que fue devuelta por Zapatero: " ¡Menuda la que han montado con el Estatuto de Cataluña! Crispando, trasladando a todos los españoles que se rompía España", le soltó muy enfadado Zapatero a Rajoy al que le recordó que vivimos en "un país plural y diverso y que se tiene que construir con el debate entre todos".


Buenas noches y buena suerte

En su despedida Zapatero hizo un resumen de su gestión destacando la ley de igualdad o presumiendo de haber  subido las pensiones. "He trabajado con toda la fuerza y la humildad, he reconocido errores y en los próximos cuatro me propongo seguir aumentando la prosperidad. No puedo prometer que todas las personas tengan éxito en su vida. Pero sí que todas tengan las mismas oportunidades para tenerlo. Y las que no lo alcancen, tendrán protección", dijo el presidente, que aseguró también que tenía "plena confianza en las posibilidades de la España libre y unida".

El broche final -tan comentado como lo de la niña de Rajoy- fue el "Buenas noches y buena suerte", frase con la que se despidió del debate Zapatero.


Segundo debate, menos encorsetado pero más crispado

José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy volvieron al plató el 3 de marzo, - cinco días antes de las generales- y ante las criticas que los dos habían recibido la vez anterior, en esta ocasión desgranaron propuestas y procuraron  mostrarse más 'sueltos' y espontáneos. En esta segunda ocasión el escenario fue el Palacio de Congresos del Campo de la Naciones y la moderadora fue la periodista de Antena 3, Olga Viza. Como en el primero, también se pactó todo, los planos, los colores del escenario, la forma de la mesa y la ubicación de cada uno....

Zapatero comenzó reivindicando su gestión y pidió otra legislatura para poder culminar su proyecto de "una España próspera y decente", sin vislumbrar la grave crisis que se barruntaba a nivel mundial. El presidente curiosamente, reprochó a Rajoy que no hubiera prestado el menor interés por la economía durante sus primeros cuatro años de mandato. El líder de la oposición aseguro que si gobierna ofrecería 'al líder de la oposición' un pacto de Estado sobre los asuntos de interés general y acabó recordando a  'la niña' que ya mencionó en el anterior cara a cara: "Esa niña está en mi cabeza y en mi corazón".

Rajoy, al que se le dio perdedor del primer debate, quiso iniciar este nuevo cara a cara de forma más 'agresiva' y comenzó su intervención preguntando  a los ciudadanos: "¿Estamos mejor ahora que hace cuatro años?". "Hay cosas que están mal y otras que están muy mal", se contestó a si mismo el líder de la oposición.

 
El Libro Blanco que todo lo sabe

El presidente lanzó un envite a los agentes sociales para  superar entre todos "el momento de desaceleración económica que vive España en un contexto mundial". Para ello dijo haber elaborado un grueso "Libro Blanco" en el que se recogen sus políticas para que sirviera de guía a los problemas con los que nos íbamos a tener que enfrentar. Rajoy no le dio tregua rebatiendo casi todas las cifras que aportaba el presidente.

No obstante, Zapatero  reconoció que la situación económica estaba empezando a cambiar y que había una "mayoría de españoles que lo están pasando mal" por la subida del paro, el alza de precios o las hipotecas. Los dos candidatos se volvieron a enzarzar en cifras y datos hasta el punto que Olga Viza sufrió para poner orden y controlar los tiempos ante las constantes interrupciones mutuas.


"Usted ha ganado las elecciones por Irak y el 11-M"

Así pasó de nuevo a abordar el problema de la inmigración, la dependencia o del terrorismo. Y aquí se volvió a armar. El presidente se comprometió a apoyar "sin condiciones" al Gobierno que ganara las elecciones pero Rajoy replicó que apoyaría al Ejecutivo "si quiere luchar contra ETA, pero no si negocia con la banda terrorista". Y ahí fue cuando Zapatero le dio a Rajoy un 'golpe bajo' recordándoles que durante su mandato solo había habido cuatro víctimas asesinadas por ETA  a diferencia de la última legislatura del PP en la que fallecieron 238 personas en atentados. Rajoy, con ostensible enfado, replicó: "No me esperaba que iba a presumir de tener menos muertos". El líder del PP le recordó que cuando Zapatero llegó al Gobierno, "ETA estaba debilitada y llevaba un año sin matar. Usted ha ganado unas elecciones por Irak y por el 11-M, y da la sensación de que quiere volver a ganar las elecciones por Irak y por el 11-M". Y tras recordarle la evolución del "proceso de paz" añadió: "Usted ha mentido. Porque usted miente siempre, usted no dice la verdad nunca, ése es el problema".

La guerra de Irak; las sanciones a los comercios que en Cataluña sólo rotulan en castellano y sus supuestas malas relaciones con los nacionalistas fueron otros aspectos del debate, que culminó con una ironía del presidente a Rajoy sobre cuándo Aznar "hablaba catalán en la intimidad".


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