La era de los gobernantes no elegidos por el pueblo: el 'ataque de los tecnócratas'

Merkel, Sarkozy... ¿son especies a extinguir en esta nueva Europa? Tanto la canciller alemana como el presidente francés fueron elegidos en las urnas, pero incluso ellos ven peligrar en las próximas elecciones sus cargos. Y mientras dirigen con mano de hierro la crisis económica y de autoridad en la Unión Europea, sobre todo en lo que a la unión monetaria se refiere, otros países ven cómo sus gobernantes se marchan. Sólo que si en un primer momento se iban derrotados en las urnas -Sócrates en Portugal,  Brown en Reino Unido, ahora Zapatero-Rubalcaba ven asomar la derrota...- parece que poco a poco son sustituidos por tecnócratas.

Grecia e Italia han sido los últimos casos y parece que abren la veda de los gobernantes electos. En el país heleno, Yorgos Papandreu ganó las elecciones a finales de 2009 y asumía el mando de la crisis de Grecia con ilusión. Al final, las cuentas que sus predecesores liberales le dejaron fueron lentamente su tumba. El órdago que lanzó a toda Europa pretendiendo someter a referéndum las reformas económicas que le imponían Bruselas, Merkel y Sarkozy para acometer un segundo rescate, fue la gota que colmó el vaso. Tuvo que dejar el poder y ahora el economista Lucas Papademos, ex vicepresidente del Banco Central Europeo, es quien lleva las riendas.

Misma historia en Italia: Silvio Berlusconi, más allá de las pocas simpatías que despierta en la política internacional, era el gobernante electo, elegido por su pueblo. Reelegido, para ser exactos. Pero ha tenido que dimitir para impedir peores represalias de los mercados contra Italia. Ahora es Mario Monti, senador vitalicio y no ligado a ningún partido, quien encabeza la jefatura del Gobierno y plantea un gabinete sin políticos 'manchados'.

El último episodio llega directamente a España. Y es que Mariano Rajoy, que se sabe ya presidente 'in pectore' de nuestro país, planea un gabinete con algunos ministros también apartados de cualquier mancha política, aunque lógicamente de ideología liberal. Así, el Ministerio de Economía podría ser ocupado por algún economista de renombre que gane enteros en círculos extranjeros, sobre todo de cara a los mercados, y así evitar suspicacias y poder generar confianza. Lo dicho... ¿llega la era de los gobernantes, ministros y altos cargos tecnócratas?


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