Fainé ha abogado durante la presentación de resultados de la entidad financiera por conseguir "el justo precio" por la nacionalización y ha considerado que no tendría sentido hacer provisiones ante posibles pérdidas de valor de Repsol porque supondría dar la razón al planteamiento inicial.
Aun así, el presidente del banco ha mostrado su malestar con la medida anunciada por el Ejecutivo argentino: "Esto no se hace al estilo compadre. Un partido no se acaba cuando se hace un gol".
Sobre los resultados de Caixabank, su presidente considera que el primer trimestre del año ha sido "excepcional" por las provisiones realizadas, aunque ha destacado "la mejora de márgenes y la reducción de gastos en las cuentas".
Adaptados al siglo XXI El presidente de CaixaBank fue claro y conciso: "Nos hemos puesto el vestido adecuado para vivir en el siglo XXI". Isidro Fainé presumió así de haber cumplido los requisitos exigidos por el Gobierno en materia de saneamiento inmobiliario.
"No hay ningún país en el mundo que haya hecho un plan de saneamiento como lo ha hecho España", insistió Fainé, que criticó, indignado, que "esto no se valora". En palabras del presidente de CaixaBank, "la crisis española no hay que ligarla sólo al tema inmobiliario, también hay falta de confianza por otros temas".
En este sentido, su consejero delegado, Juan María Nin, precisó que "el país donde mejor llegará el dinero del BCE (Banco Central Europeo) a la economía real es España". Precisamente, Nin fue el encargado de detallar las claves que permitieron a CaixaBank cumplir con "el decretazo", como definió a la nueva ley de reforma financiera.
"Cuando se tienen las metas claras y un nivel de exigencia alto, los resultados acompañan", advirtió Nin, que recordó también el esfuerzo que hará la entidad al integrar a Banca Cívica en CaixaBank.
Esta operación quedará aprobada en su integridad el próximo mes de julio, para terminar la fusión tecnológica en abril del año que viene, según los datos facilitados por el consejero delegado.
Las "incertidumbres" del mercado, como definió Fainé la situación actual, no evitará que CaixaBank cumplirá con su política de retribuciones de dividendo, llegando, incluso, a revalorizar la acción un 20% en 2014.
La gran promesa, incrementar el beneficio un 20% hasta 2014Por otro lado, tal y como prometieron el día que presentaron la operación con Banca Cívica, Isidro Fainé, presidente de La Caixa, y Joan Maria Nin, vicepresidente, han asegurado que con la integración del grupo de cajas liderado por Caja Navarra se podrá incrementar el beneficio por acción de Caixabank un 20% dentro de dos años.
Ambos ejecutivos han destacado las cifras futuras de la entidad resultante de la fusión de Caixabank y Banca Cívica. La operación permitirá incrementar los activos de la entidad catalana un 25%. Además, incorporará tres millones de nuevos clientes.
"Hacer esto en un periodo de estancamiento no es nada fácil. La fusión es buena para los accionistas, porque creemos que se va a revalorizar la acción y, como decía Warren Buffett, lo importante es el beneficio por acción. Pues bien, nosotros esperamos incrementarlo un 20% hasta 2014".
Apuesta por Latinoamérica"Un pinchazo en el camino no cambia la estrategia. Seguimos apostando por Latinoamérica", ha aseverado Fainé al ser preguntado si esta actuación del gobierno argentino modificará la estrategia de La Caixa en el continente.
El vicepresidente y consejero delegado de CaixaBank, Joan Maria Nin, ha añadido que se están preparando aperturas de oficinas en Colombia, Chile y Estados Unidos, y analizando otras operaciones en un continente "que en estos momentos ofrece lo mejor".
Fainé congeló su sueldo en 2011El presidente de Caixabank mantuvo su salario congelado en 2011 y obtuvo una remuneración de 1,12 millones de euros, la misma cantidad que percibió en 2010. No obstante, a esta cifra habría que sumar lo que recibió de sus cargos en los consejos de otras compañías.
En total, los 19 miembros del consejo de administración percibieron una remuneración conjunta de 4,6 millones euros durante 2011. De ellos, destaca también la retribución de Juan María Nin, que tras asumir en junio el cargo de vicepresidente, percibió 1,02 euros en el conjunto del año.
La tercera retribución más elevada del consejo fue para Gonzalo Gortázar, que recibió de Caixabank 869.000 euros más otros 90.000 euros proceentes de otras sociedades del grupo.
La entidad ha facilitado estos datos en el informe de gestión de la entidad que facilitará a los accionistas en la junta general de la entidad que tiene lugar hoy en Barcelona. No obstante, Caixabank aclara que la comparativa con 2010 resulta compleja debido a la conversión del grupo de caja a banco.
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