La remodelación de las llamadas 'embajadas autonómicas' para ahorrar costes que se anunció a bombo y platillo se ha quedado a medio camino. Hasta marzo sólo se han eliminado 26 de las 192 que existían hace dos años.
Y eso que el Gobierno ha ofrecido a las comunidades compartir sus espacios -129 embajadas y los 97 consulados- para evitar dobles costos y duplicidades, sin que dejen de ejercer su labor de atracción comercial para las regiones, pero parece que el tema no convence... Sólo La Rioja, C. Valenciana y Castilla y León -esta última gasta en su oficina de Bruselas 250.000 euros al año- tienen pactos con Exteriores y próximamente podrían hacerlo también Aragón, Galicia y Navarra. ¿En qué cabeza cabe que existan estas representaciones mientras se recorta en Educación y Sanidad donde las autonomías sí tienen competencias?