"Revisaremos el modelo de prestaciones por desempleo garantizando
que no generen efectos desincentivadores de la búsqueda de empleo,
siguiendo el ejemplo de algunos países de la UE", ha explicado el
presidente, precisando no obstante que no se modificará ni el periodo
máximo de duración de las prestaciones por desempleo (24 meses) ni el
importe actual "durante los primeros seis meses".
Sin embargo, "para animar la búsqueda activa de trabajo, los
nuevos receptores que se incorporen a la prestación la verán reducida
desde el sexto mes del 60% al 50% de la base reguladora".
Actualmente, durante los primeros seis meses, la prestación
por desempleo equivale al 70% de la base reguladora, es decir, al 70%
del último salario percibido, mientras que a partir del sexto mes se
cobra el 60%. Lo que el Gobierno ha anunciado es que ese 60% pasará al
50% para los nuevos parados, con lo que verán reducida la cuantía de la
prestación.
Asimismo, Rajoy ha avanzado que se exigirá haber trabajado previamente para acceder a la Renta Activa de Inserción (RAI).
Además, Rajoy también ha anunciado que "se suprimirán muchas
bonificaciones a la contratación", salvo las relativas al nuevo
contrato de emprendedores creado con la reforma laboral o las de
inserción para el colectivo de discapacitados.