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Luis Miguel Molina. Presidente de FECEVAL

'Reprochamos al Gobierno regional que no haya tomado las medidas con la urgencia que requerían'

"Reprochamos al Gobierno regional que no haya tomado las medidas con la urgencia que requerían"

lunes 24 de septiembre de 2012, 07:52h

Luis Miguel Molina es el presidente de los empresarios de Valdepeñas y Campo de Montiel en la provincia de Ciudad Real (FECEVAL). Una asociación que agrupa a más de 500 empresas con un denominador común: una situación complicada y una fluidez en los créditos que no termina de llegar. Diariocrítico de Castilla-La Mancha acaba de celebrar su iniciativa Emprendedores 2020 en una comarca de la que Molina nos habla con preocupación y lanza algunos reproches al actual Gobierno regional.

 

Pregunta.- ¿Cómo está el sector empresarial en Valdepeñas?

Respuesta.- Valdepeñas no es una excepción al escenario regional o nacional. La situación es bastante complicada porque aunque en buena parte se sigue viviendo en torno al sector agrario, al vino, el modelo en el que creció en los últimos 15 o 20 años, la construcción, al irse a pique todas las empresas relacionadas ha provocado numerosos cierres y que mucha gente quedase en el paro. El motor ahora de la economía valdepeñera está relacionado con el comercio. El problema ahora es el descenso del consumo. Por eso el único sector que saca la cabeza es el sector agrícola que paradójicamente no lo ha pasado bien en los últimos años.

P.- Me imagino que, sobre todo, los sectores que se mueven en torno al vino...

R.- Sí, pero de todas formas, lo que mucha gente no sabe es que el sector vitivinícola en Valdepeñas representa no más del 20% del tejido empresarial. De ahí que aunque la agricultura no esté en un momento tan malo como años atrás porque el precio de la uva se paga más caro y los datos de exportación no son malos, el paro ha crecido mucho. Se palpa el cierre de muchos establecimientos comerciales o el cierre de empresas significativas en la construcción.

P.- ¿De qué volumen de paro hablamos?

R.- La tasa de paro está en un 17% pero en demandantes estamos, seguramente, en torno al 22%.Para una zona como la llanura manchega, al sudeste de la provincia de Ciudad Real que es muy amplia en extensión pero que no tiene demasiada población, este dato es demoledor y significativo de lo mal que está la situación. Lo más desagradable son las pocas alternativas que podemos tener a corto plazo. Mientras no haya reactivación del consumo directo no hay atisbo de que esto vaya a cambiar.

P.- ¿Cuáles son, entonces, las prioridades del empresariado?

R.- Las mismas que la del empresariado en general: La generación de confianza. ¿Eso cómo se hace? Pues que los gobiernos, de una vez por todas, tomen las medidas que tengan que tomar, por muy graves que puedan llegar a ser. Que seamos conscientes de que hemos tocado suelo. Mientras eso no suceda la falta de confianza seguirá. Después, que las empresas tengamos acceso a líneas de financiación razonables, y no tan abusivas como a las que ahora nos están sometiendo. Algo muy gordo tiene que estar fallando cuando casi el 100% de empresas de la comarca tienen dificultades para acceder al crédito razonable. Mientras estaremos en una economía peor que la de supervivencia porque lo que hará el empresario será funcionar como pueda y no va a invertir en sus negocios.

P.- Pero entonces... ¿Las ayudas a la banca y el rediseño del sector financiero español no ha servido para nada?

R.- Desgraciadamente ha pasado lo que todos esperábamos. Hablo con muchos empresarios y todos me hacen la misma reflexión: Todos sabíamos que ese dinero no iba a llegar al empresario. No necesitamos vivir de las subvenciones sino seguir funcionando. Hace dos años renegociábamos líneas de crédito en torno a un 2%, que es un interés razonable, y ahora nos encontramos con un 9%. Es insostenible. Algo debe hacer el gobierno para que se preste el dinero en condiciones normales, nada más. En época de bonanza nos han apoyado y ahora que necesitamos el dinero para vivir y no para especular, no se nos ayuda. Si esto sigue así asistiremos a un colapso del sector empresarial.

P.- ¿Qué proyectos tiene sobre la mesa Feceval?

R.- Estamos trabajando con el alcalde de Valdepeñas en la elaboración de un Plan Estratégico de Desarrollo Empresarial. Se trata de aprovechar la situación estratégica de Valdepeñas y marcar un nuevo patrón de crecimiento, hacia qué mercados podemos ir y salir a buscar empresas que puedan instalarse en Valdepeñas y su comarca.

Para eso necesitamos un proyecto viable que marque el camino en los próximos 10 o 15 años y que se pueda poner en marcha. Es nuestra prioridad.

También llevamos dos años intentando desbloquear la situación para poner en marcha un campo de golf que tendría una repercusión altísima en el sector comercio y de servicios de la localidad. Sabemos de su viabilidad pese a las condiciones urbanas que tiene el terreno con fachada a la autovía. Buscamos iniciativa privada que pueda retomar este proyecto.

P.- Y hablando de otras cosas... ¿Se ha notado el cambio de Gobierno en Castilla-La Mancha?

R.- Siempre digo que los empresarios no entendemos de colores. Ni debemos. No voy a juzgar si las políticas han sido o no adecuadas porque podríamos entrar a valorar si el déficit que había antes era o no el correcto. La realidad es que al empresario se le ha tenido ahogado. Primero con el pago a proveedores por parte de la Administración. Unos han cobrado, otros un poco... Lo que necesitamos es que esto ya no vaya a más y que podemos mirar hacia adelante.

P.- Hace unos días escuchábamos a Cospedal en el Debate sobre el Estado de la Región ¿Qué conclusiones saca?

R.- Lo que nos gustaría es que las medidas por parte del Gobierno regional viniesen a flexibilizar un poco aquello de lo que estamos hablando. No queremos ayudas ni subvenciones sino facilidades para buscarnos la financiación. ¿Realmente?... No, no se ha notado cambio. Espero y deseo por el bien de toda la región que esto no se quede en un estancamiento definitivo y que las medidas que se han puesto en marcha sean efectivas.

P.- El presidente de CECAM, Angel Nicolás, calificó esas medidas como dolorosas pero necesarias. No sé si de lo que acaba de decir tengo que deducir que no coincide del todo con esa opinión...

R.- Quizá sea pronto para evaluarlas. No sé si son las adecuadas, las necesarias y si son todas las que habría que tomar. Insisto en que esto tiene que tener un punto final. Las que se decidan se tienen que poner en marcha ya. No hay más margen de maniobras. Nos jugamos que muchas familias se queden en la calle y que se hundan negocios de muchos años. Lo que sí se puede reprochar al actual gobierno regional es que no se hayan tomado las medidas con la urgencia que requerían y de la manera que había que tomarlas. Tenemos la sensación desde el sector empresarial que habrá más medidas y que vendrán a endurecer aún más la situación.

P.- ¿A que medidas se refiere? ¿Destinadas al ciudadano, al empresario, a todos...?

R.- Lo que está claro es que quien más tiene, más paga.Cuando decimos quien más tiene, lógicamente el empresariado está soportando en mayor medida la subida de impuestos y demás. Creo que se nos va a seguir exigiendo y no podemos responder más. Nadie tiene ahora capacidad de especular o enriquecerse. O hay cambio de rumbo en la toma de decisiones para que dinero se mueva o es imposible.

P.- Me imagino que la subida del IVA ha caído como un jarro de agua fría también en Valdepeñas...

R.- Por supuesto y le puedo decir que el sector comercial al que me dedico ha absorbido directamente la subida del IVA. Por eso le decía que hemos hecho ya todos los esfuerzos posibles. No estamos encareciendo el producto para ser competitivos y tenemos que reducir los márgenes al mínimo. No es una frase hecha decir que estamos sobrepasando nuestros límites.

"LAS DIPUTACIONES SON NECESARIAS EN LAS PEQUEÑAS COMARCAS"

P.- ¿Y a usted que le parece cuando se anuncia la reducción del Parlamento a la mitad o que los diputados de Castilla-La Mancha no van a cobrar sueldo?

R.- Lo que hay en la calle es que sobran políticos en Castilla-La Mancha y en España. Creo la situación es suficientemente delicada y extrema como para tomar medidas impensables hasta ahora. No sé hasta qué punto el planteamiento de las Comunidades Autónomas podría reinventarse o someterse a un estudio profundo de viabilidad. Lo que sí veo en las comarcas pequeñas, con menos de 5.000 habitantes, es la necesidad de las diputaciones. Creo que deberían mantenerse pero el sistema autonómico es imposible de mantener. Es imposible tener 17 competencias distintas en todas las materias. La calle pide un cambio en ese sentido.

P.- Se ha anunciado una Cumbre del Vino en la región... ¿Puede ayudar a la recuperación económica de la zona?

R.- Cualquier iniciativa puede ayudar pero desconozco el planteamiento exacto. Vamos a ver...Hay una Feria Regional del Vino, FENAVIN, que quizá es el marco adecuado. Se ha hecho bien. Es una feria muy representativa del sector...No sé si hay que crear otro foro. Si puede aportar, bienvenido sea pero si no, sobre lo que hay vamos a potenciarlo, trayendo a más gente de fuera. Hemos perdido durante años la carrera del vino con otras Denominaciones de Origen a la hora de elaborar vinos de calidad. Pero ahora, y hablo en general, se están haciendo unos vinos en la región que pueden competir en calidad-precio. Pero nos queda bastante camino. Tenemos potencial por la situación estratégica y vamos a apostar por líneas turísticas en otoño, invierno y primavera.

P.- FECEVAL abandonó el paraguas de CEOE-Ciudad Real ¿Hay alguna intención de volverá integrarse en la confederación provincial?

R.- Tomamos una decisión que nunca nos hubiese gustado tomar por nuestra vocación de asociacionismo. CEOE-Cepyme nos da esa representatividad general. El problema es que las difíciles circunstancias por las que atravesó la confederación provincial nos llevaron a tomar una decisión dolorosa pero que resultó ser fácil porque no teníamos alternativa. De no haberlo hecho, Feceval no existiría. Llevábamos 13 años integrados pero durante los seis u ocho últimos años la relación ha sido complicada. Ha habido una muy mala gestión desde Ciudad Real. Nos tenían totalmente oprimidos en el sentido de no poder desarrollar ni una cuarta parte de lo que poníamos sobre la mesa, fuera lo que fuera.

Dejamos una deuda en Ciudad Real de más de 9.000 euros porque todo se contabilizaba en caja única. No sé si alguna vez se pagará y si no lo hacen nosotros responderemos moralmente y la pagaremos. Si la situación en Ciudad Real es reconducible, si la gestión cambia y se convierte en algo absolutamente transparente, si es viable y como tiene que ser volveremos a integrarnos pero como la premisa de la autonomía. Nunca con el modelo anterior.

 

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