Moody's reconoce que el dinero del FLA "reduce el riesgo de impago a corto plazo", pero como efecto negativo incluye la dependencia del Gobierno central para la financiación regional.
El Gobierno de Castilla-La Mancha no comparte la decisión de Moody' y asegura que tomó decisión de acudir al Fondo de Liquidez Autonómico el pasado 27 de septiembre, "debido a las dificultades para atender los vencimientos de la abultada deuda de 10.800 millones de euros que arrastra la región, fruto de la nefasta gestión del anterior Gobierno socialista, que dejó más de 7.200 millones de deuda financiera y 600.000 facturas sin pagar".
"Hubiera sido irresponsable no solicitar la ayuda"
El Ejecutivo recuerda que Castilla-La Mancha "no tiene cerrado el acceso a los mercados financieros, aunque las condiciones que estos exigen para conceder créditos, debido a un contexto generalizado de crisis económica, exigen tipos de interés muy altos".
En este sentido recuerdan, el Fondo de Liquidez, por el contrario, ofrece tipos mucho más ventajosos para la región de los que conceden los bancos, por lo que el Gobierno de Castilla-La Mancha considera que" hubiera sido irresponsable no solicitar la ayuda".
Gracias al dinero que proporcionará el fondo a la región, aseguran, "se podrá hacer frente a deuda social con entidades locales y proveedores, que de otro modo hubiera sido imposible atender".
Hay que recordar que Castilla-La Mancha se acogió hace cuatro meses voluntariamente al otro mecanismo que puso en marcha el Gobierno central para mejorar la liquidez, el conocido como mecanismo de pago a proveedores, gracias al cual se pudo pagar la deuda de casi 3.000 millones de euros que el Gobierno socialista había dejado a deber a miles de proveedores. Ahora, concluyen, "con el Fondo de Liquidez Autonómica, la región podrá hacer frente al pago de parte de la deuda heredada".
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