El borrador de Wert todavía no ha sido aprobado pero ya está levantando ampollas. Lógico y normal. El ministro quiere españolizar Cataluña pero los catalonio se niegan. Y les doy la razón. Y se la doy porque, o siendo yo nada sospechosa de aplaudir ideas independentistas, sí soy de apoyar la libertad: la libertad que los padres tenemos que tener de escoger lo que queremos para la eduación de nuestros hijos. Y no sólo para aquellos que tienen dinero para pagarse unos buenos colegios privados donde escoges hasta el menú, sino también para la educación pública (que no gratis que en este mundo nada lo es).
Religión, educación para la ciudadanía, educación por sexos, en español, en gallego, en euskera, en catalán. Elección. El mismo derecho tienen los catalanes que siguen a Mas de escolarizar en catalán como derecho tienen otros catalanes en hacerlo en castellano. No entiendo la razón de la imposición. ¿Saldría caro? Probablemente pero no más que rescatar a chorizos. Y de eso nos convencen a todos (o a casi todos).
De prosperar esta ley, absurda en muchísimos aspectos, estaremos dando más pasos hacia atrás. Claro que parece tarea imprescindible que en este país, con cada cambio de gobierno, haya un nuevo cambio de la ley de educación que, además, siempre es para empeorar las cosas. Los ministros de cultura son como los perros, tienen que marcar el territorio y dejar su huella. Ahora toca españolizar, veremos a ver a qué nos lleva, cuanto nos dura y, sobre todo, cuánto nos cuesta porque esto, como todo, no nos saldrá gratis. Ahora bien, que no protesten los catalonios porque van a recibir de su propia medicina. Quizás si la ley prospere entiendan lo injusto que llos han sido imponiendo el catalán por doquier. Y que no me diga la consejera catalana de educación que no impide un correcto aprendizaje del castellano porque ella misma es un ejemplo de que hablar bien, lo que se dice bien, no lo habla. Claro que la consejería de educación catalana era aquella que recomendaba la mastrubación a los menores...
El caso es que el día que se conocen nuevos datos (nefastos de nuevo) del paro los políticos siguen a los suyo: segur cargándose este país. Da igual cómo. Y a todo esto ha pasado la noche detenido el señor de los consejos: "para salir de esta crisis hay que trabajar más y cobrar menos". ya saben, el señor Díaz-Ferrán, ex presidente de la CEOE. Seremos pobres pero a cara dura y estar a por uvas no hay país que nos gane. De traca.
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