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34 años no es nada

34 años no es nada

jueves 06 de diciembre de 2012, 11:53h
Hay aniversarios que producen alegría, el de la Constitución es uno de ellos. Nuestra Carta Magna ha cumplido 34 años y si nos atenemos a la última encuesta del CIS los ciudadanos se quejan de no conocerla debidamente porque ningún Gobierno ha hecho nada para divulgarla.

   Si los dirigentes políticos se pararan un minuto a reflexionar sobre esta queja, llegarían a la conclusión de que en vez de intentar adoctrinar a los ciudadanos, unos con Educación para la Ciudadanía, otros imponiendo la asignatura de religión, lo más sensato sería que n las escuelas se explicara la Constitución.

   Pero los ciudadanos dicen más, mucho más, en la encuesta del CIS. Por ejemplo, uno de cada cuatro ciudadanos se muestra contrario a la actual organización de nuestro país en Comunidades Autónomas. Un 32 por ciento apuesta por el Estado autonómico, pero un 24 por ciento prefiere ponerlas punto final. Es otro dato para reflexionar.

   Las encuestas del CIS suelen ser muy reveladoras porque muestran el sentir de la ciudadanía y quizá sería conveniente que en la próxima encuesta se pregunte qué modelo de Estado se prefiere y si se cree necesario reformar la Constitución. Me dirán que implícitamente esas respuestas se sobrentienden en la actual, pero siempre es mejor preguntar directamente para no llevarse a engaños.

   Lo que es evidente es que con la Constitución del 78, España ha vivido una etapa de libertad larga y fructífera que nos ha permitido convertirnos en un país moderno y pujante aunque ahora aparezca ensombrecido a causa de la crisis.

   Hay quienes defienden una actualización de la Constitución, es decir, una reforma que pasaría por apostar por un modelo federal. Y frente a quienes defienden esa nueva puesta a punto "federal" están los que prefieren la supresión de las Comunidades Autónomas y volver a recentralizar el Estado. Lo cierto es que el Estado Autonómico a algunos se les ha quedado pequeño y otros lo consideran ineficaz. También en este capítulo los responsables políticos deberían de tomar nota y reflexionar sobre el sentir de la ciudadanía.

   En todo caso cualquier modificación de la Constitución debería de llevarse a cabo con el mismo consenso con que se elaboró la Constitución del 78, de lo contrario, en vez de arreglar problemas, se crearían otros nuevos. La pregunta es si en estos momentos es posible ese consenso, porque si no lo fuera, lo mejor sería dejar las cosas como están por más que en lo que se refiere al Estado Autonómico sea más que evidente que necesita unos cuántos ajustes para ser más eficaz y financiarse de manera más equilibrada.

   Pero más allá del disgusto de algunos ciudadanos por el actual modelo de Estado, lo cierto es que nuestra Carta Magna es una de las más modernas y desde luego en el capitulo de derechos y libertades no se debería de cambiar ni una coma.

   34 años después la Constitución es lo mejor que tenemos y deberíamos de ser capaces entre todos de cuidarla. Es una pena que quienes contribuyeron a hacerla posible, me refiero a Convergència i Unió, hoy estén haciendo una política enloquecida que pone en cuestión la Carta Magna. Eso sí, según la encuesta del CIS somos mayoría los que pensamos que la Constitución es nuestra mejor garantía de libertad, así que "larga vida" y que cumpla muchos más.
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