La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida. Como cantaba
Rubén Blades. Porque, sí, muchos rumores, muchas confidencias de jugadores del primer equipo, directivos y empleados del club a periodistas amigos, y mucha 'vox pópuli':
Iker Casillas y
José Mourinho se llevan fatal. Para colmo, el técnico portugués castigó al guardameta -nombrado la semana pasada por quinta vez consecutiva el mejor del mundo- con la suplencia en los dos últimos partidos -aunque el guiño del destino hiciera que Casillas tuviera que salir en el minuto 9 por la expulsión del titular Adán-. Sí, es verdad, pero...
Pero el capitán del Real Madrid y de la selección, en su voto para el Balón de Oro al mejor entrenador se inclinó por... su enemigo ¡Mourinho!,como se ha sabido tras hacerse públicas las actas de todos los que tenían derecho a votar. Lo cual desmiente, en parte, esas pésimas relaciones o pone al portero en una situación difícil. Este es uno de los comentarios más extendidos por los aficionados, también en las redes sociales, aunque también se preguntan, dado que la decisión de Casillas fue hace meses -el voto permanece secreto después hasta la ceremonia- si el de Móstoles se habría pronunciado también por su entrenador hace dos semanas, cuando éste le condenó a la suplencia. Y ya que empezamos con una canción, acabamos con otra, de un tal
Bob Dylan: la respuesta está en el viento.
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No(
