La tasa de paro juvenil escaló así hasta el 57,22% al
término del primer trimestre, lo que supone 2,1 puntos más que en el
trimestre anterior, cuando el desempleo de los jóvenes menores de 25
años se situó en el 55,12%.
En el último año, el número de jóvenes en paro se ha incrementado en 38.600 desempleados (+4,2%). La tasa de paro actual de los menores de 25 años es 5 puntos superior a la existente en el primer trimestre de 2012 (52,1%).
La actividad no ha podido amortiguar en el primer trimestre la subida
del paro entre el colectivo juvenil, pues no ha experimentado cambios,
de tal forma que el número de activos menores de 25 años se ha mantenido en 1.678.400 personas.
Los jóvenes y los parados de larga duración (más de un año en el
desempleo) están siendo uno de los colectivos más castigados por la
crisis.
De los más de 6,2 millones de parados contabilizados en España al finalizar marzo, el 15,5% son jóvenes menores de 25 años y el 46,7% son parados de larga duración.
De hecho, el número de parados de larga duración se incrementó en
111.200 personas en el primer trimestre, un 4% más que en el trimestre
anterior, hasta situarse por encima de los 2,9 millones de personas. En el último año, los parados de larga duración han aumentado en 515.700 personas (+21,6%).
El colectivo de los menores de 25 años es uno de los más golpeados
por la crisis. Su tasa de paro se ha situado en el 57,2%, lo que supone
que 960.400 jóvenes que buscan un trabajo no lo encuentran.
En el caso de los jóvenes entre 25 y 29 años, hay 880.800 de ellos en el paro, un 35,92% de su población activa; mientras que del grupo de entre 30 y 34 años hay 895.900, un 27,63%.
Respecto a los mayores de 50 años, el colectivo entre 55 y 59 años tiene 393.700 personas sin encontrar trabajo, un 20,84%; mientras que hay 175.500 con más de 60 años sin empleo, un 19,26% del total.