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El arzobispo de Toledo vuelve a hablar de la crisis en su alocución

Toledo se viste de gala para celebrar el Corpus Christi

jueves 30 de mayo de 2013, 13:52h

La Custodia de Arfe, gran atracción de la procesión del Corpus Christi toledano, ha salido por la Puerta Llana de la Catedral Primada para iniciar el recorrido procesional en torno a las 11.50 horas de este jueves, fiel a su tradición para volver a su sede en torno a las 14 horas.


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En la calle ha sido recibida por salvas reales, el toque de campanas de la Catedral y emocionados aplausos y vivas de los asistentes, así como el himno de España que vuelve a sonar cuando regresa al templo.

   La Custodia fue realizada durante ocho años por Enrique de Arfe, en cuya elaboración se invirtieron más de 152 kilos de plata con los que el mejor orfebre que había en España en el año 1515, quien realizó una estructura de cuatro cuerpos de desigual altura.

   La custodia, que mide dos metros y medio de altura, se compone de 5.600 piezas y 7.500 tornillos, ostenta 260 estatuillas y pesa 17 arrobas y una libra, y va encima de una carroza construida en 1781 en León por Bernardo Miquelez.

   Es de madera con figuras talladas, de alto relieve unas y completamente exentas otras, representando en cuatro medallones los Santos Evangelistas, uno en cada frente, y en las esquinas una especie de sirenas con otros ornatos de fruteros, espigas, racimos y angelitos.

   La carroza es empujada por seis hombres que van dentro de ella, mientras que un obrero de la catedral, vestido con traje negro de paño, nivela la custodia en las pendientes.

Arzobispo: "No estoy dispuesto a que aquellos que tengan más medios sean más favorecidos"

La Custodia realizaba la tradicional parada en la plaza de Zocodover, en la que el arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha dirigido su tradicional alocución a los fieles.

Braulio Rodríguez, ha asegurado ante cientos de fieles congregados en la Plaza de Zocodover de Toledo y ante la Custodia de Arfe, que no está dispuesto "a que aquellos que tengan más medios económicos sean más favorecidos y, además, acallen sus conciencias, si es que les acusan por mal comportamiento en su vida social o cristiana".

   Según ha afirmado con motivo de la alocución que ha pronunciado con motivo del Corpus Christi, "cada uno de nosotros tiene su responsabilidad social" y será el Señor "quien les juzgue".

   "Es verdad que nos dicen que nosotros, tu Iglesia, únicamente hemos de tener una tarea en esta sociedad: atender a los pobres en su sustento material. Y olvidemos lo demás, que ya no interesa a nuestros contemporáneos", ha comentado el arzobispo en el inicio de sus palabras, admitiendo que no se puede descuidar el servicio de la caridad.

   Asimismo, citando a San Justino, ha recalcado que "para la Iglesia, la caridad no es una especie de actualidad de asistencia social que también se podría dejar a otros, sino que pertenece a su naturaleza y es manifestación irrenunciable de su propia esencia". "Veo, que el anuncio de la Palabra, la celebración de los Sacramentos y el servicio de la Caridad son tareas que se implican mutuamente y no pueden separarse la una de las otras", ha manifestado.

   Dicho esto, ha reconocido que en la Iglesia "cuesta vivir como familia de Dios en el mundo" y considera que "en esta familia no debe haber nadie que sufra por falta de lo necesario". "Tal vez no lo hacemos del todo bien. Quizá por ello nos dicen que hoy lo que se necesita no es la caridad --¿ni Cáritas?, se ha preguntado-- sino la justicia", ha dicho.

La caridad y la crisis

   "Que la caridad --ha añadido-- la utiliza tu Iglesia, Señor, como un modo de que los ricos eludan la instauración de la justicia y acallen su conciencia, conservando su propia posición social y despojando a los pobres de sus derechos. Que lo que hay que hacer es crear un orden justo, en el que todos reciban su parte de los bienes del mundo y, por tanto, no necesitan ya obras de caridad".

   Pero, mientras llega o se instale un orden justo, siempre necesario, se ha preguntado si acaso "hemos resuelto los problemas, por poner más o menos ideología y contemplar la crisis desde el punto de vista sólo economicista" y si no es mejor introducir "la dimensión moral, ética".

   Según ha indicado, "lo que contemplamos, por el contrario es que la mayoría de hombres y mujeres de nuestro tiempo siguen viviendo precariamente en nuestro planeta". "¿Seremos capaces, unos y otros de entender que la crisis, su crudeza y persistencia es también de naturaliza ética y moral?", se ha preguntado.

   Ha lamentado que en la actualidad se considere al ser humano en sí mismo como un bien de consumo "que se puede usar y luego tirar". "Damos fuerza, Señor Sacramentado, para que no ocurra esto entre nosotros, para que tus discípulos no pensemos que la caridad es un ejercicio de la Iglesia reservado a algunos especialmente capacitados y dedicados a este servicio", ha indicado.

   A su juicio, la Iglesia aún tiene que convencer a muchos de que la caridad no se opone a la justicia y ha admitido que "es cierto que una norma fundamental del Estado debe ser perseguir la justicia", algo que también ha subrayado la doctrina cristiana sobre el Estado. "La panacea para solucionar los problemas sociales no es la revolución mundial. Ese sueño se ha desvanecido, tampoco un capitalismo sin entrañas", ha avisado.

La política 

 También ha asegurado que "la política es más que una simple técnica para determinar los ordenamiento públicos" y ha afirmado que "su origen y su meta está precisamente en la justicia, y ésta es naturaleza ética". "Y la naturaleza específica de la fe cristiana es la relación con el Dios vivo, un encuentro más allá del ámbito propio de la razón, pero que ayuda a la razón a ser mejor ella misma".

   "No pretendemos que la Iglesia tenga un poder sobre el Estado. Tampoco queremos imponer a los que no comparten nuestra fe, nuestras propias perspectivas y modo de comportamiento. Pero sí estamos convencidos de que la doctrina social de la Iglesia puede contribuir a la purificación de la razón y aportar su propia ayuda para lo que es justo, aquí y ahora pueda ser puesto también en práctica".

   Finalmente, el arzobispo ha explicado que si ha aprovechado su alocución en la Plaza de Zocodover "para hablar de cosas aparentemente no religiosas" ha sido sólo porque le preocupaba "el ser humano, su desvalimiento, la situación de tantos hermanos, la falta de unión para conseguir el bien común".

 Antes, durante la misa, había mostrado su "preocupación" porque en general los cristianos entienden "poco de la naturaleza íntima de lo que es la eucaristía". "¿No hemos de apreciarla mucho más en nuestra vida de creyentes, por ejemplo, celebrando la misa dominical a la que tantos abandonan?", se ha preguntado ante miles de fieles y autoridades.

Miles de personas disfrutan del Corpus

Miles de personas han presenciado la procesión del Corpus Christi de Toledo, fiesta declarada de Interés Turístico Internacional, en las abarrotadas calles del Casco

 Histórico bajo unas temperaturas más frescas de lo habitual y muy decoradas.

En nombre del Gobierno regional han desfilado su portavoz y consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Leandro Esteban; y el consejero de Hacienda, Arturo Romaní.

   Las Cortes de Castilla-La Mancha han estado representadas por su presidente, Vicente Tirado, que ha desfilado junto a la vicepresidenta primera, Cesárea Arnedo, y la secretaria primera, Inmaculada López, que se estrenaba en estos menesteres. El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, lo ha hecho presidiendo la Corporación municipal, y el presidente de la Diputación de Toledo, Arturo García-Tizón, la provincial.

También han desfilado autoridades militares y judiciales, encabezadas éstas últimas por el presidente del Tribunal Superior de Justicia de la región, Vicente Rouco, flanqueado por el presidente y el fiscal jefe de la Audiencia toledana, Manuel Gutiérrez, y Francisco Javier Polo, respectivamente. También lo ha hecho el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado.

   Desde los balcones de la Delegación del Gobierno, unas 200 personas, entre autoridades civiles, militares, políticas y embajadores, han disfrutado la procesión, junto a funcionarios, trabajadores de la institución y medios de comunicación.

   Es tradición que con la primeras luces del día las calles del casco antiguo de Toledo se cubran de ramilletes de tomillo y romero y que los cohetes y morteros anuncien la fiesta grande de la capital regional en la que se engalanan los muros de la Catedral Primada con bellos tapices de los siglos XVI y XVII.

   La procesión del Corpus Christi de Toledo salió por primera vez en 1263, y en la actualidad está declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional. Con motivo del mismo, las calles de la ciudad se engalanan desde días antes con diferentes adornos, flores, tapices y mantones de Manila que cuelgan de los balcones.

Fiesta de unión y alegría

   Después del desfile de los militares por la Plaza de Zocodover hacia la Academia de Infantería, que pone punto y final a la procesión del Corpus, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador; el presidente de las Cortes regionales, Vicente Tirado; el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas y portavoz de la Junta, Leandro Esteban; y el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, han realizado declaraciones desde la sala de prensa de la Delegación.

   De este modo, Jesús Labrador ha destacado que la "fiesta, unión y alegría" que representa la festividad del Corpus debe trasladarse al resto de días del año para que "mirar hacia el futuro que todos queremos", al tiempo que ha agradecido a los medios de comunicación el trabajo que realizan un día como el de hoy porque "sin ellos las fiestas no alcanzarían el desarrollo que tienen que tener".

   "Todo Toledo se vuelca en este día porque es nuestra fiesta y sacamos lo mejor que tenemos para decorar nuestras calles y nuestros balcones porque los que somos católicos estamos convencidos de que nos viene a ver Jesús Sacramentado", ha señalado Labrador, quien ha abogado por defender las "tradiciones y creencias, respetando las de los demás".

   Por su parte, Vicente Tirado ha subrayado que la festividad del Corpus --que combina lo religioso, lo cultural y lo histórico-- "hace de Toledo la capital del mundo" y ha apelado por "la unidad, el acuerdo y el consenso" sobre todo en estos momentos en que hay mucha gente que lo está pasando mal.

   "Es momento de caminar todos juntos, de darnos la mano, y de sacar adelante una situación que es complicada y difícil pero de la que estoy seguro vamos a salir", se ha mostrado convencido Tirado.

   Esteban ha destacado que el Corpus Christi de Toledo representa la "colaboración, el respeto y armonía" que existe entre todas las instituciones que participan, cuyo objetivo principal es "buscar soluciones" y "trabajar en beneficio de todos los ciudadanos".  

   El consejero ha afirmado que esta celebración religiosa forma parte de "nuestras raíces", ya que "simboliza el sentir de la calle", algo que se ha reflejado en la "altísima participación" de muchos castellano-manchegos que se han acercado a Toledo para disfrutar de la procesión.

   Finalmente, ha resaltado el trabajo de todas las personas, instituciones religiosas, así como la labor de Fuerzas Armadas, Policía Nacional y Guardia Civil, ya que hacen que esta procesión sea "un éxito, una explosión de belleza y un espectáculo sensorial".

  Por último, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page se ha mostrado muy contento de cómo se han desarrollado los actos y por la participación "masiva y multitudinaria" de toledanos, castellano-manchegos y españoles y ha aprovechado para animar a todos los toledanos a que sigan el desarrollo de los actos hasta el domingo. Además, ha confiado en que el próximo año este día vuelva a ser fiesta regional.

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