La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) considera que la actual reforma de las pensiones puesta en marcha por el Gobierno español que incorpora el factor de sostenibilidad, para vincular la prestación por jubilación a la esperanza de vida, es "más justa", pero advierte de que también genera "incertidumbre" en torno a las pensiones futuras.
"Aunque esta reforma podría llevar a un reparto más justo de los riesgos entre generaciones y dar una justificación al ahorro que los votantes encuentren creíble y razonable, también incrementa la incertidumbre para los futuros jubilados acerca de sus pensiones", señala la OCDE.
En su informe global de pensiones de 2013, la Organización destaca que estas dudas pueden ser especialmente relevantes para los trabajadores de bajos ingresos, por lo que considera importante "vigilar cuidadosamente la pobreza de los pensionistas".
La OCDE destaca que las preocupaciones sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones español, derivadas del rápido envejecimiento de la población y la crisis económica, han impulsado reformas en el sistema en los últimos años.
En este sentido, destaca que España gasta actualmente el 10% del Producto Interior Bruto (PIB) en las pensiones, cifra inferior a la de Francia e Italia, pero ligeramente superior a la media de la OCDE.
Envejecimiento de la poblaciónSin embargo, advierte de que la elevada esperanza de vida y la baja fertilidad se están traduciendo en un rápido envejecimiento de la población, lo que incrementará las presiones sobre la financiación de las presiones en el futuro. "En 2060 habrá menos de dos personas en edad de trabajar por cada jubilado en comparación con las más de tres de hoy en día", remarca.
En esta línea, recuerda que la reforma de las pensiones de 2011 estrechó el vínculo entre los ingresos y las prestaciones, elevó la edad de jubilación a 67 e introdujo el principio general de ajuste automático a la esperanza de vida.
Teniendo en cuenta esta reforma, un informe de la Unión Europea (UE) prevé que el gasto público en pensiones aumente al 14% del PIB en 2015, un nivel también superior al de la media de la OCDE, pero inferior al previsto para Italia y Francia.
Por otro lado, resalta que la calidad de vida media de los mayores de 65 años en España está en línea con la media de la OCDE, aunque añade que las transferencias de dinero público representan el 72% de los ingresos de los jubilados en España, frente al 59% de media de la OCDE.
Además, destaca que España ha logrado reducir "sustancialmente" la pobreza en la tercera edad, ya que bajó del 21% de 2007 al 12% de 2010, mientras que en la OCDE descendió desde el 15,1% al 12,8%. Además, añade que la calidad de vida de los jubilados españoles también se ve influenciada por la cantidad de personas con casa en propiedad, que reduce sus gastos en vivienda.
Menores pensiones y salariosPor otro lado, el informe apunta que a nivel global las reformas recientes en los sistemas de pensiones se traducirán en que la mayoría de los trabajadores que se incorporen al mercado laboral actual tendrán pensiones más bajas, a diferencia de las generaciones pasadas, y que necesitarán ahorrar más dinero para su jubilación.
En este sentido, añade también que trabajar más tiempo puede compensar algunas de las reducciones, pero incide, sin embargo, en que la cotización total será menor que la actual.
"Elevar la edad de retiro y promover las pensiones privadas son pasos que van en la dirección indicada, pero por sí solos son insuficientes" aseguró el secretario general de la OCDE,
Angel Gurría, quien instó a los gobiernos a considerar el impacto a largo plazo en la cohesión social, la desigualdad y la pobreza.
La OCDE explica que en la mayoría de los países se ha protegido "considerablemente" a las personas con salarios bajos contra los recortes, y que éstas recibirán en su jubilación cerca del 70% de su salario por todo su tiempo de trabajo.
Sin embargo, las personas con un ingreso medio recibirán solamente en promedio el 54% de su salario en el momento de su jubilación, "enfrentándose al riesgo de una gran caída en sus estándares de vida".
Por su parte, las personas con altos ingresos recibirán solamente 48% de sus ingresos, pero son las menos vulnerables debido a sus altos ahorros personales y sus inversiones.
"Es crucial mantener bajos los costes de los planes de pensiones personales y profesionales. Los gobiernos necesitan urgentemente abordar esto como parte de sus esfuerzos con el fin de promover los sistemas de pensiones privados", recomienda.
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