Un paseo por la Península y el Palacio Real de la Magdalena
miércoles 12 de febrero de 2014, 17:54h
El Palacio Real de la Magdalena es uno de los edificios más emblemáticos de Santander. Ubicado en la península del mismo nombre, mezcla en su arquitectura estilos franceses con elementos típicos de la arquitectura montañesa. En 1908 comienza su construcción por parte del Ayuntamiento de Santander, que encarga el proyecto a los arquitectos cántabros Javier González Riancho y Gonzalo Bringas Vega. Su construcción finaliza en en 1912. El ayuntamiento regala el palacio a los reyes de España, que veranean en Santander durante 17 años.
En 1932 se crea la Universidad Internacional de Santander, que comienza a celebrar sus cursos en distintas dependencias del Palacio de la Magdalena. Su primer rector fue Menéndez Pidal. Tras un paréntesis por la guerra civil española, en 1949, la Universidad Internacional retoma sus cursos denominándose "Menéndez Pelayo" UIMP. Por sus aulas han pasado las figuras más prestigiosas de la intelectualidad española e internacional. Nombres como Miguel de Unamuno, Federico García Lorca, Vargas Llosa, Pepe Hierro... han participado en estos cursos. Entre 1993 y 1995 el Palacio fue rehabilitado y desde 1977 puede ser visitado por aquellos que los deseen.
La Península de la Magdalena
La península de la Magdalena es el espacio natural situado en plena ciudad de Santander donde su ubica el palacio del mismo nombre. Son más de 25 hectáreas de campo, donde se dan varias especies arbóreas, y que se pueden recorrer siguiendo un camino circular que la rodea. A la entrada de este gran parque se puede ver el antiguo Campo, un pabellón municipal y un amplio parque infantil. Justo detrás está el paraninfo de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y el edificio de las antiguas caballerizas reales, que hoy se dedica a residencia para los estudiantes extranjeros de la UIMP.
A la derecha de estos edificios está la playa de los 'Bikinis', así llamada al ser uno de los primeros lugares donde se vieron estas prendas playeras en Cantabria. En el recorrido ascendente se encuentran el Embarcadero Real y el faro de 'La Cerda'. Siguiendo el camino se llega hasta la explanada donde se alza el magnífico palacio, y desde donde se divisan unas espectaculares vistas de la bahía de Santander, Cabo Mayor, las playas de El Sardinero y algunas de las zonas más emblemáticas de Santander.
En el camino de descenso, nos encontramos con las tres carabelas que el marino cántabro Vital Alsar donó a Santander. Junto a ellas está un peculiar mini-zoo que alberga, en recintos naturales que cogen el agua directamente del mar, a un nutrido grupo de animales marinos.
Para aquellos que deseen hacer esta excursión de manera más cómoda, en la Península existe un servicio de tren turístico llamado 'El magdaleno' que facilita el viaje.
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