"El cambio climático provoca ya más muertos que el terrorismo". José Luís Rodriguez Zapatero, en la Cumbre Iberoamericana. Montevideo 4 de noviembre de 2006. He ahí el estadista de salón. El filósofo Gustavo Bueno ha analizado en un libro el pensamiento del presidente del Gobierno y ha llegado a la conclusión de que lo más profundo del mismo es el vacío, aderezado con golpes de simplicidad e ingenuidad. Vive, como Alicia, en el País de las Maravillas. El profesor asturiano dice que toma decisiones y adquiere compromisos -por congratularse con la audiencia- sin que nadie se los pida; y esto hace que vaya tejiendo a su alrededor una tela de araña de la que no puede escapar. Las soluciones, mañana; siempre mañana. Una huida hacia delante permanente.
Su promesa más famosa (y cara) ha sido a Pascual Maragall. El Estatuto de Cataluña ha generado una crispación y una violencia desconocidas desde antes de la Transición. Los abstencionistas y quienes votaron en blanco en las elecciones del 1N han confirmado que los nacionalistas y la izquierda catalanas han sufrido un duro revés. Y que el 'muñidor' de todo este volcán autonómico no es otro que Zapatero, quien se arrugó la noche electoral tras conocerse los resultados. Una derrota en toda regla de Zapatero y de su candidato por accidente, José Montilla. Ahora la venganza del PSC es reeditar el tripartito y gestionar el desarrollo del texto que, si no lo enmienda el Tribunal Constitucional abrirá una brecha social y política sin precedentes.
Puede que él se haya sentido muy a gusto cuando viajó al Principado con un millar de escoltas, pero nuestro secretario general Angel Acebes y nuestro candidato Josep Piqué no han podido hacer una campaña electoral en las mismas condiciones de igualdad que los otros candidatos, ni Manuel Fraga pronunciar una lección magistral en la Universidad de Granada porque este Estado de deshecho (que no de Derecho) no garantiza la seguridad ni las libertades. Nos sentimos orgullosos del trabajo de nuestros compañeros catalanes por defender la Constitución en todas partes. Y en condiciones tan difíciles. ¿Dónde está la igualdad de oportunidades?
Que los simpatizantes del PP -y, asimismo, los de Ciutadans- hayan sido retenidos durante horas, agredidos, amenazados de muerte y que tengan que animarse gritando ¡libertad, libertad!, al igual que en los estertores de la dictadura franquista, es un síntoma evidente de que a ZP los nacionalistas y separatistas le han tomado la medida, le han ganado el pulso y lo exprimen como a un limón. Zapatero es rehén de CiU y del PNV -antes lo fue de ERC- y el rescate lo paga vía PGE/2008.
Mientras tanto, Eta, siempre llama dos veces. Una, con Otegui y asociados de la 'kale borroka' prolongando la violencia y la socialización del dolor y, la otra, con la amenaza permanente de reanudar la práctica del tiro en la nuca a los compañeros constitucionalistas del País Vasco, que es lo mismo que decir a los demócratas populares. El chantaje del fín de semana es claro: Autodeterminación y territorialidad. Como siempre. "O cumple los compromisos o responderá".
ZP, desde su soledad de La Moncloa , se cree más listo que nadie, un estratega que puede engañar a todos todo el tiempo: a ETA, a Merkel, Rajoy, Carod, Ibarretxe (y su plan), Maragall, Bono, Montilla, Más…) pero el silencio en estos tiempos no es el mejor arma de futuro para creer en un dirigente que tan sólo ha aprendido a callar y a imponer las decisiones a golpe del CIS. Zapatero ha entrado en el trance del iluminismo. Y en su particular cuenta atrás. Su único proyecto es subirse a lomos del entramado etarra creyendo que su misión imposible es la de pacificar el norte y su siguiente viaje al extranjero, recibir en Oslo el Premio Nóbel de la Paz.
El nieto del capitán Lozano -ahora conocemos mejor su hoja de servicios reprimiendo la rebelión de mineros asturianos en 1934-, se atrinchera en las razones de estado para negarnos información sobre la verdad el 11-M y sobre las negociaciones con los terroristas. 'España no se merece un gobierno que mienta'. ¿Recuerdan? Su tancredismo se traduce en que aquí nunca pasa nada, sin darse cuenta de que su irresponsabilidad e inacción, nos está condenando directamente a una crisis institucional.
Mariano Rajoy le ha tendido una mano para salir del 'infierno' de las conversaciones con ETA-Batasuna; le ha exigido que acuda al Parlamento para que explique las "medidas" que iba a tomar después de que ETA robara 350 pistolas en Francia y tras conocerse la comprensión de ZP el mega asesino de Juana Chaos. Sigue autista. Aún se escuchaban en el hemiciclo estas palabras de nuestro presidente nacional: "lleva camino -le dio a Zapatero- de rendir el Estado democrático a ETA".
En el Senado, nuestro portavoz Pio Garcia Escudero, le relató en su comparecencia de octubre pasado un rosario de hechos -solo hechos- que explican cómo y por qué conoció y consintió contactos con Batasuna mientras él mismo firmaba con el PP el Pacto Antiterrorista, acordaba la Ley de Partidos y Eta mataba a Joseba Pagazaurtundúa. La doble moral hipócrita de un oportunista.
Las letras de sus múltiples compromisos empiezan a vencer. Y hay que pagar una deuda que, ojala, no se haga a costa de desmantelar la Constitución. ¿Va a legalizar ZP Batasuna sin condenar la violencia? De momento, ya ha dado vía libre a internacionalizar el "conflicto vasco" en el Parlamento Europeo, previsto en la hoja de ruta de la izquierda abertzale. ¡Qué papelón el de los socialistas españoles y en especial el del presidente Rodríguez rompiendo a los demócratas primero en España y luego en la Unión Europea! ¡Que victoria más pírrica e inmoral!
¿Ahora es Montenegro el modelo a seguir, según ha proclamado Patxi López? Hay que reconocer que este Gobierno para cada solución tiene tres problemas con valor añadido.
En estos treinta meses de republicanismo socialista, lo más visible como estrategia ha sido intentar echar al PP -y a diez millones y medio de españoles que le votamos- de las instituciones democráticas. El problema no es el PP sino el pp (proceso de paz) que nos está llevando directamente a la antesala del fascismo. Ahí tienen a los heroicos militantes de ICV repartiendo condones con el lema "Fóllate a la derecha" o al esperpéntico Llamazares apoyando una resolución para que el Parlamento cese al Defensor del Pueblo, Enrique Mújica, por haber llevado el Estatut ante el Constitucional. Y por si no estuviéramos suficientemente rodeados, ahí esta la frase, escrita en sede parlamentaria por el fiscal general del Gobierno, el ínclito Conde Pompidu: "La justicia no está para favorecer procesos políticos. Pero no está tampoco, para obstaculizarlos". Y luego dice que no quiere hacer política. La intervención de nuestro senador por Toledo, Agustín Conde, exigiendo su dimisión, fue una pieza oratoria que servirá de referencia para todos los funcionarios que actúan antes como comisarios políticos que como servidores del estado.
En esa línea de acoso a la libertad - porque de lo que se trata es de enterrar la libertad- hay que interpretar las filtraciones (en vena), en los pasillos del Senado del 'portacoz' Fernando Moraleda, amenazando a los periodistas con vigilar el camino para saber hasta dónde llega el 'veneno' del PP. -"Llega, señor secretario de Estado, hasta donde se extiende el pesebre de Moncloa."
Ya no asustan a nadie a estas alturas de la película. Solo es el reflejo de un pensamiento único; o lo que es lo mismo: la falta y el miedo a la libertad. Porque la libertad -no la paz - es el verdadero proceso para acabar con ET A. La libertad y la ley. Toda la ley. La libertad, señor Rodríguez, es el camino.
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* Rodolfo Ainsa es senador del PP por Huesca
Si (
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