18 años por matar a 25 personas, 2 por defraudar 100 millones, 14 por asesinar a sus mujeres... asaltar la casa de Bárcenas: 22 años

Por comparar, valgan estos ejemplos:

- 19 años de cárcel de media es lo que los tribunales sentencian y condenan por asesinato en la pareja sentimental tras el maltrato de género, aunque se convierten en 14 años reales de media por buen comportamiento, según varios medios

- 12 años de cárcel, sólo 12, es lo habitual en sentencias por homicidio; es la media que suele establecerse por un asesinato fuera de la pareja y sin ensañamiento

- 20 años: fue la condena que asumió Miguel Carcaño por matar a la niña Marta del Castillo; fue el asesino confeso, pero al no haber cadáver, la condena fue también menor

- 22 años: la condena por matar a la niña Mari Luz por parte del pederasta Santiago del Valle, quien actuó con la ayuda de su hermana. Se espera que no llegue a cumplir esos 22 años si hay buen comportamiento

- 2 años por defraudar 100 millones a Hacienda: es la sentencia que afrontó el ex presidente de la patronal española, la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán. Se enfrenta a más causas judiciales, pero de momento le ha salido barato ese fraude de 99 millones, para ser exactos

- 18 años por 25 asesinatos: es la indignante y conocida condena que tan sólo asumió el etarra De Juana Chaos, quien como dirigente de la banda terrorista fue directa o indirectamente responsable de estas muertes. Él como otros presos de ETA, se han visto beneficiados durante años por la posibilidad de acumular condenas.

¿Qué tienen en común estas condenas y por qué se ponen ahora a la luz para hablar de Enrique Olivares García, quien ha sido condenado a 22 años por un delito de allanamiento de morada de la casa de Luis Bárcenas y su familia, tres delitos de secuestros, tres delitos de amenazas, un delito de tenencia ilícita de armas y tres faltas de lesiones? Pues que todos tendrán menor o igual condena de prisión por delitos más graves, al menos desde la óptica de la sociedad.

El 'falso cura' que asaltó la casa de Bárcenas -y para nada supone una justificación para sus delitos- tendrá que asumir una década más de cárcel que un hombre que mata a su pareja, o 2 más que Carcaño, asesino confeso de Marta del Castillo. Por no hablar de los fraudes a Hacienda: Díaz-Ferrán, entre otras personalidades en los últimos años, ha sido condenado por engañar a todos los españoles sirviéndose de su poder y defraudar casi 100 millones. ¿Qué daño es mayor para la sociedad? ¿Ése o asaltar la casa de Bárcenas?

El debate está abierto, sobre todo por lo que supone de desequilibrio para el Código Penal. En todo caso, hay que puntualizar que los magistrados fijaron ayer expresamente en 18 años de prisión el límite máximo de cumplimiento efectivo de la condena del acusado, por lo que quedarán extinguidas el resto de las penas impuestas una vez cubierto dicho máximo.

Sin embargo, lo curioso es que el condenado parece ser un enfermo mental. "¡Qué me condenen a lo que quieran!. Firmo 20 años o lo que me digan. Estas voces no me dejan en paz. Por favor, no quiero oírlas más, lárguense de mi cabeza, déjenme en paz, por favor. Fuera de mi cabeza", manifestó durante la lectura de la sentencia.